Nacida en Cartagena en 1979, Noelia Arroyo es licenciada en Comunicación Audiovisual y trabajó en varios medios de comunicación regionales antes de incorporarse a la administración regional. Desde 2015 es la cara y la voz del Gobierno regional al asumir desde entonces la portavocía del Ejecutivo autonómico, primero con Pedro Antonio Sánchez a la cabeza y desde septiembre del año pasado con Fernando López Miras, tras la renuncia de Sánchez por su investigación en el seno de los casos Púnica y Auditorio, de resunta corrupción.

Desde que entró en el Gobierno regional, Arroyo se ha postulado como la principal valedora de Cartagena en San Esteban. De hecho ella misma afirma que desde que entró en el Ejecutivo autonómico, ha estado trabajando codo con codo con el grupo municipal de la ciudad portuaria y el partido para conseguir mejoras.

Durante los últimos meses casi ha igualado su tiempo en la capital de la Región, en asuntos de su Departamento, y en Cartagena, en una clara apuesta por hacerse ver y notar entre los ciudadanos. De hecho, su participación en la Semana Santa ha sido copiosa, debido a que ha sido nombrada madrina de numerosas agrupaciones. Y también ha tomado decisiones que le han valido la complacencia de los cartageneros más localistas, como asistir a la presentación del dulce de San Ginés de la Jara el mismo día que se celebraba el Bando de la Huerta en Murcia, aunque le dio tiempo a tomar la A-30 de regreso a la capital y participar en el almuerzo organizado por el presidente regional.

Una vez ya oficializado su nombramiento, ahora Arroyo debe organizar su agenda tanto para continuar el trabajo de su departamento regional como para que su imagen se asocie más a la ciudad que quiere gobernar y menos al Ejecutivo de López Miras.