Familiares y amigos han despedido entre lágrimas y desconsolados esta mañana a Rosa María, la joven de 20 años que el lunes murió a manos de su expareja. La familia ha celebrado una misa funeral en la ermita del Calvario de Cartagena esta mañana. Sin embargo, los restos mortales de la joven han regresado al Instituto Anatómico Forense de Cartagena, donde permanecerán hasta que el juez de la autorización para que pueda producirse la cremación, ya que la investigación sigue abierta.

Durante todo el día de ayer los familiares velaron a la joven en el Tanatorio Estavesa, donde el desconsuelo era generalizado. No se encuentra explicación a un drama así. Los psicólogos de Cruz Roja intentaron ayudarles en este trance.

El exnovio de Rosa María, que se coló en su casa el lunes por un balcón para darle dos puñadalas mortales, ha estado ingresado en el hospital por las heridas que se produjo al caer. Este martes se ha decretado su ingreso en prisión