Los familiares de los cinco policías nacionales acusados de matar a Diego Pérez dieron por bueno el acuerdo entre la Fiscalía, la defensa y la acusación.

«No estamos contentos porque se ha demostrado que no lo mataron. En cualquier caso, creemos que esta decisión a la que hemos llegado es la mejor porque la presión mediática que ha rodeado al caso hacía que si se llegaba a juicio pudieran salir más perjudicados», aseguraron los familiares.

Pese a la condena de cuatro años, creen desde la defensa que de haber llegado a juicio se podría haber peleado el caso ya que, afirman «Cala Cortina no está considerado como un sitio peligroso. Él salió corriendo, pero no lo dejaron en un sitio peligroso. Consideramos que son inocentes».

Los familiares de los acusados afirman que a partir de ahora ya se ha acabado y podrán superar este trance una vez se ha llegado a una conclusión en el caso. «No nos hemos planteado ir a juicio porque el eco mediático que ha tenido el caso desde sus inicios nos generaba una incertidumbre muy grande como para intentar pelear el caso, aunque creemos que podríamos haberlo ganado», aseguran los familiares de los acusados.

Los familiares de los acusados insisten en que el forense demostró que no mataron a Diego Pérez y por lo tanto no cometieron ningún crimen ya que consideran que el delito de homicidio imprudente no se ajusta a los hechos. «Cala Cortina no está considerado por nadie como un sitio peligroso por lo que podía haber fallecido en ese escenario en cualquier otra circunstancia».

Por tanto, creen que el único error que cometieron fue no seguir los pasos adecuados en la detención y que marca el código interno de la Policía. «¿Cuánta gente inocente hay en la cárcel?», se preguntan los familiares de los policía condenados.

Silencio desde la acusación

La familia del fallecido en Cala Cortina no quiso realizar declaraciones tras el acuerdo alcanzado. Afirman que son momentos complicados y pidieron unos días de tranquilidad para llevar una resolución con la que no están conformes ya que , afirmaron de forma escueta, esperaban una condena mayor.