El barrio cartagenero de San Antón se ha convertido en un «polvorín» debido a la «dejadez» del Ayuntamiento. Eso es lo que denuncia el presidente de la asociación de vecinos, Asensio Albaladejo. El representante de este castizo lugar de la ciudad explica que hay una veintena de solares descuidados, que están repartidos por distintos lugares del barrio. «Están llenos de maleza y con basura, pero nadie los limpia», critica Albaladejo. Para él, tener estos terrenos así son un «grave riesgo» para la seguridad de los vecinos. De hecho, hace unas semanas los bomberos sofocaron un incendio que se originó en uno de estos solares, situado en la calle Pedro Díaz. «El fuego estuvo a punto de propagarse por las viviendas colindantes», expone el portavoz de los residentes. Asimismo, el lunes día 21 de agosto también se originó otro fuego en un terreno situado entre las calles Obispo y Hermanos Pinzón. «Tendríamos que tener un retén de bomberos», advierte con rabia Albaladejo.

Los vecinos exponen que estos focos de «insalubridad» tienen que ser limpiados por sus propietarios. «La gran parte de ellos son de propiedad privada, pero hay otros muchos que son de titularidad municipal», expone el presidente San Antón. No obstante, critica que «el Consistorio tiene que encargarse de limpiarlos todos de forma urgente, incluidos los que no son de su propiedad». Albaladejo informa de que el Consistorio tiene que advertir a los propietarios de los solares para que se adecenten los terrenos, o mandar a los operarios municipales de limpieza para que arreglen el desaguisado y, a posteriori, pasarle la factura de estas tareas a los propietarios. «Pero la administración local no hace nada, los concejales vienen a San Antón, nos dan muchas promesas, pero no cumplen nada, llevamos así ya casi un año y no han hecho nada», lamenta Albaladejo, quien también critica que, en líneas generales, «el barrio necesita más personal de limpieza. La empresa municipal Lhicarsa sólo manda a un operario para que barra por San Antón, es insuficiente».

Los solares abandonados del barrio se han convertido en un problema que trasciende más allá de lo estético. «Son focos de infecciones, ya que los terrenos son aprovechados por las ratas para criar. Hay una plaga. En ocasiones vemos ratas del tamaño de gatos corriendo por las calles del barrio. Si un día uno de estos bichos le muerde a alguien va a ocurrir una desgracia». Así las cosas, expone el representante del barrio, la gente de San Antón está deseando «marcharse» y cada vez hay menos vecinos.

Por otro lado, Albaladejo explicó respecto a la cárcel de San Antón que temen «que el grado de protección Bien de Interés Cultural (BIC) que va a declarar la Consejería de Cultura no va a ser suficiente para evitar el derrumbe de este inmueble». Hay que recordar que ha sido adquirido mediante subasta pública por el hospital Perpetuo Socorro.

No hay soluciones inmediatas

Desde el Ayuntamiento afirman que son conscientes de las necesidades de los vecinos de San Antón pero piden paciencia ya que «sabemos que necesitan soluciones urgentes pero eso en la administración pública es complicado. Una gestión suele llevar meses», afirman fuentes municipales. «No podemos llegar a todos los sitios a la vez», insisten. No obstante, desde el Gobierno municipal declararon a LA OPINIÓN estudiar con detenimiento los problemas de los vecinos del barrio.