«En caso de no ser atendidos en el Obispado de Cartagena, estamos dispuestos a llevar esta situación al Vaticano». Fueron las palabras del alcalde José López tras la incomparecencia de la Consejería de Cultura, así como del obispo, José Manuel Lorca Planes, a la reunión convocada por el regidor para avanzar en la recuperación de la Catedral Antigua.
Según el alcalde, « Cartagena ha vuelto a ser decepcionada por quienes deben ser impulsores de la restauración integral del templo». En la reunión promovida por López se pretendían aportar «soluciones concretas para olvidar años de promesas e incumplimientos con los cartageneros».
De este foro de trabajo debería desembocar «la contratación del Plan Director, así como la voluntad inequívoca de las administraciones y el obispado de afrontar este ineludible reto», dijo López.
El escrito remitido por el Gobierno local fue respondido el jueves por el Ejecutivo regional, mediante burofax, a través de la exconsejera de Cultura, Noelia Arroyo, aduciendo que el encuentro era «prematuro» en tanto en cuanto «no se haya avanzado en el proyecto». Por lo que respecta al Obispado, desde la sede episcopal se hizo llegar ayer una carta firmada por Lorca Planes, en la que se afirmó que «la prudencia aconseja esperar».
Asimismo, el alcalde recordó al Obispado su deber de cumplir con la Ley de Patrimonio Histórico en la apertura obligatoria de los edificios Bien de Interés Cultural, a los que el público debe poder acceder al menos cuatro días al mes.
