Los trabajos para recuperar el Anfiteatro Romano se han reactivado. Así quedo evidenciado en la visita que el alcalde José López, acompañado del concejal de Patrimonio Arqueológico, Ricardo Segado, llevó a cabo al yacimiento, sin revuelo mediático, para conocer la evolución de los trabajos.
Y es que, técnicos arqueológicos contratados por el Ayuntamiento de Cartagena ya han comenzado los sondeos de unas bóvedas del Anfiteatro que se excavaron en 1998 como paso previo para la intervención general prevista en el yacimiento, tal y como informaron ayer fuentes municipales.
El recorrido de López y Segado estuvo guiado por la directora general de Patrimonio Histórico y Arqueológico, Mari Carmen Berrocal, que dijo que se ha comenzado una intervención puntual para obtener «una serie de datos fundamentales para preparar la general en todo el complejo».
Así, el primer dato que se quiere obtener con el sondeo es el estado en el que se encuentran esas bóvedas para que el ingeniero del proyecto realice las catas necesarias para continuar con los trabajos de recuperación del yacimiento.
Una vez que se obtenga esa información, indicaron las mismas fuentes, se podrá finalizar el proyecto de intervención en un cuadrante de la plaza, en la que se sabe que hay tres bóvedas y varias salas, para posteriormente iniciar los trabajos en esta zona.
Calle Chiqueros
Al finalizar esta primera fase, daría comienzo la segunda parte de la actuación, que tiene previsto realizarse en el área de la calle Chiqueros. En esta zona se va a comprobar sobre qué se asienta el muro de la plaza de toros que se levanta sobre los restos del Anfiteatro Romano.
El equipo del proyecto sostuvo que, «por las características que se están viendo en el resto de la plaza, podría ser solo relleno de tierra», por lo que al encontrarse el muro muy degradado por el contacto con la atmósfera y el impacto ambiental sobre la arenisca, adelantaron que «se tomarán las medidas pertinentes para la conservación y sobre todo la seguridad del entorno».
