Una médico del Área de Salud II (Cartagena) ha logrado determinar por primera vez el nivel máximo de glucosa o azúcar en la sangre que deben tener los pacientes con diabetes para prevenir que se produzcan episodios de ataques cardiovasculares como infartos o ictus. La doctora Ana Cebrián, médico de familia del centro de salud de San Antón, ha llevado a cabo un estudio sobre esa materia con cerca de 17.600 pacientes a los que ha hecho un seguimiento durante cinco años. Su investigación ha sido premiada con la beca Manuel Ferreiro para asistir al 52 congreso anual de la Asociación Europea para el Estudio de la Diabetes (EASD).

Para esta investigación, la doctora se ha basado en los controles de hemoglobina glicosada, un examen de sangre para pacientes con diabetes tipo 2 y prediabetes que mide el nivel promedio de glucosa o azúcar en sangre durante los últimos tres meses y que habitualmente se utiliza para ver cómo está el paciente manejando su enfermedad.

Esta prueba es diferente a los controles diarios que las personas diabéticas se hacen, porque su resultado se analiza en porcentajes: a mayor porcentaje, mayor nivel de azúcar en la sangre. El nivel normal de este tipo de hemoglobina glicosada en una persona sana es inferior al 5,7 % y, según el citado estudio, los pacientes con menos de 70 años deberían tener los niveles de esta prueba por debajo del 6,5% para prevenir episodios cardiovasculares como infartos e ictus.

Una de las conclusiones más interesantes del estudio es que los menores de 70 años necesitan hacerse más controles que los mayores para prevenir este tipo de enfermedades.

En el caso de los pacientes de más de 70 años, según este trabajo, se necesita un control menos estricto y es aceptable el valor de 7,5 a 8% en la prueba de hemoglobina glicosilada para prevenir esas patologías.

Cebrián señaló que estos datos demuestran que «hay que ser más estrictos con los pacientes con diabetes más jóvenes, que llevan menos tiempo de evolución de la enfermedad, y que cuanto antes se ataque la diabetes, se obtienen mejores resultados».

El estudio también verifica la recomendación que sostiene la Sociedad Española de Diabetes para aquellos pacientes con patologías más complicadas y que son mayores de 70 años y una década de evolución, para los que son aceptables los controles de hemoglobina glicosilada a partir de 7,5%.

Cartagena tiene registrados 21.113 pacientes con esta enfermedad. De ellos, 11.327 son varones (53,6%) y 9.786 son mujeres (46,3%). Además, 20.305 (96,1%) son pacientes que presentan diabetes mellitus tipo 2 y 808 (3,8%) padecen diabetes tipo 1 y son insulinodependientes.

Antes del verano, Sanidad anunció que el área de Cartagena será una de las primeras de la Región en implantar uno de los proyectos prioritarios del Servicio Murciano de Salud dentro de su ´Estrategia de atención al enfermo crónico´ y llevará a cabo con el paciente diabético. La estrategia pretende mejorar la preparación de los profesionales para dar continuidad asistencial a los pacientes.