El incumplimiento del compromiso adquirido con los padres para construir un nuevo colegio en La Aljorra, la «proliferación» de hasta once aulas prefabricadas, la falta de profesores y sobrepasar la proporción legal de alumnos por clase son «carencias no solventadas» por el Gobierno regional en Cartagena en el inicio de curso. Así lo expresó ayer el concejal de Educación, David Martínez, que mostró su «preocupación» por estas deficiencias a falta de dos días para comenzar el curso y su desacuerdo con el uso de aulas prefabricadas para albergar las clases, al tiempo que criticó el retraso en la adjudicación de las plazas de profesor interino.

Asimismo, advirtió de que hay «muchos centros» que sobrepasan la proporción de 25 alumnos por clase establecido por la Lomce y llegan a alcanzar los 30, como ocurre en el colegio San Isidoro y Santa Florentina, «mientras que en colegios como el de La Manga hay aulas mixtas en infantil donde comparten clase niños de 4 y 5 años».

«Habrá que ahorrar en otras cuestiones, pero no en educación», añadió antes de detallar que los padres de La Aljorra ya han anunciado que «sus hijos no irán al colegio» al no haber construido el Gobierno autonómico el nuevo centro.

Al respecto, el alcalde de Cartagena, José López, afirmó que las «artimañas» utilizadas por el Ejecutivo autonómico para «retrasar sine die» ese proyecto van a provocar que no se inviertan los 271.000 euros incluidos en los presupuestos locales de este año para adecuar la parcela municipal donde va el nuevo colegio, que sustituiría a los dos actuales, uno de ellos en una zona inundable.