Las familias de los alumnos de los colegios Miguel de Cervantes y La Aljorra, ambos en la diputación cartagenera que da nombre a este último centro, preparan una huelga para la vuelta al cole. Los padres llevan años reclamando que se construya un colegio único en el pueblo.

Las manifestaciones, que han sido convocadas por la Plataforma Único Colegio serán los días 8 y 9 de septiembre a las nueve de la mañana en las escuelas. La intención de los progenitores, según ellos mismos cuentan, es que sus hijos no entren esos días a clase como protesta. Además, anuncian que tienen previsto manifestarse en la puerta del despacho del exconsejero de Educación y actual presidente de la Comunidad, Pedro Antonio Sánchez. Esta concentración en el Palacio de San Esteban de Murcia será el 12 de septiembre.

Las familias denuncian a través de un comunicado que ven indicios de presunta prevaricación por parte de la dirección general de Ordenación del Territorio. Según los afectados, este departamento de la Administración regional «vuelve a solicitar a la Confederación Hidrográfica del Segura un informe, cuando este organismo ya emitió uno que indicaba claramente que la zona no es de su competencia, y que es, precisamente, el ayuntamiento de Cartagena y la Dirección General, quienes ostentan las competencias para determinar la actuación en el terreno». Asimismo, aseveran que «esta misma Dirección hizo una serie de recomendaciones que no tienen sentido. Ya que todas ellas se aplican a terrenos inundables y el que nos atañe dejaría de serlo una vez realizadas las obras de acondicionamiento de la parcela propuesta por el Consistorio».

Sobre esto último, los vecinos de La Aljorra agradecen públicamente la predisposición del Gobierno local, así como su apoyo «frente a constantes trabas presentadas por la Comunidad Autónoma».

En cuanto a las pautas de la dirección general, apuntan que «estas recomendaciones se basan en un proyecto de Real Decreto, que como tal es sólo un proyecto y, por lo tanto, no es de aplicación legal en España».

En definitiva, los familiares de los escolares critican «la dejación de funciones de la Administración regional, así como la ausencia de criterio técnico». Por eso, lamentan que se sienten «ninguneados» por el Gobierno autonómico «al continuar, éste, paralizando» el proyecto para construir el colegio único.