Un hombre de origen marroquí, de 35 años de edad, aproximadamente , agredió en la terraza de un bar situado en la Urbanización Mediterráneo a un misionero ante la presencia de los clientes y del propio camarero del local. Fray Job de Jesús, nombre religioso del agredido, que es fraile de la orden de los franciscanos, se encontraba sentado en la terraza del bar alrededor de las 19.00 horas cuando el agresor se acercó con la intención de arrancarle la cruz de madera que colgaba visiblemente de su cuello. Como defensa, el fraile franciscano paró las manos del denunciado y se distanció de él, evitando cualquier tipo de problema, así como también un puñetazo que no llegó a alcanzarle.
El hombre le siguió hasta la puerta del local, para proferirle insultos y constantes amenazas de muerte tales como «eres español. tú eres de aquí,entonces si es así me tienes que tener miedo, que yo soy árabe» o «cabrón, hijo de puta, te voy a matar». Posteriormente, le agarró de la camiseta hasta llegar a romperla, para continuar con las amanezas y el amedrantamiento.
El camarero del local salió pocos segundos después para ayudar y echar de la zona al alborotador, pero recibió, como respuesta, un golpe en la cabeza con una botella de cristal lanzada por el ahora denunciado.
Tras el botellazo recibido en la cabeza, el marroquí rompió un vaso de cristal con posterior intención de coger un trozo residual y acercarse al misionero. Dos individuos, también de nacionalidad marroquí, que se encontraban dentro del bar intervinieron en el altercado, consiguiendo parar al agresor que se acercaba con un trozo de cristal a Fray Job.
El hombre huyo trás lo sucedido y los testigos procedieron a llamar a los agentes de la Policía Nacional, personandose en la zona poco después.
Tras la denuncia interpuesta por Fray Job se ha abierto una investigación para buscar al autor de los hechos, del que, por el momento, se conoce su lugar de trabajo y zona de residencia.
"Su intención era ideológica"
El fraile Fray Job, misionero durante cuatro años en República Dominicana y original de Cartagena, se encontraba en la ciudad para visitar a sus familiares. Subraya que el individuo no iba con intención de robar su cruz puesto que ésta carece de valor material al ser de madera. «Su intención era ideológica», afirma basandose en las continuas amenazas recibidas aquella tarde. Además, habla de un claro síntoma de «cristianofobia» por parte del agresor al querer sutraerle la cruz sin previo aviso y sin conocerle de nada.
El abogado del fraile, Antonio Casado Mena, asegura que el autor de los hechos estaría cometiendo un delito de amenazas, aunque por el momento lo importante es «encontrarle».
El cuerpo de Policia Nacional en la mañana de ayer, reunió los datos suficientes para iniciar la búsqueda del denunciado. En cuanto a la agresión recibida al camarero, éste no ha querido presentar denuncia.
