Un vecino de Cabo de Palos se enfrenta a una sanción de hasta un millón de euros, tras haber sido denunciado por la Guardia Civil por tener en su vivienda cuatro ánforas romana y un lingote de plomo que sacó del mar, y que forman parte del Patrimonio Histórico Arqueológico de la Región de Murcia.

La operación, que adelantó hace unos días LA OPINIÓN, se inició cuando la Benemérita -gracias a la colaboración ciudadana- tuvo conocimiento de la existencia de distintas piezas antiguas en un domicilio de Cabo de Palos. Expertos de la Guardia Civil localizaron la vivienda e identificaron las piezas descritas por un ciudadano que, supuestamente, detectó los objetos en internet a través de una web dedicada a la venta de inmuebles, donde se publicaban fotografías del interior de una casa en cuyo interior aparecían varios efectos del cierto valor artístico y cultural, informó ayer este Cuerpo en un comunicado.

La Benemérita, junto con el servicio de Patrimonio Histórico de la Comunidad Autónoma, determinó que se trataba de piezas romanas: ánforas tipo Greco-Itálica, Púnico-Ebusitana, así como un cuerpo de ánfora y un cuello y dos asas pendientes de datar.

El poseedor de los bienes incautados ha sido denunciado y la cuantía de la sanción dependerá de la graveda de las conductas, la categoría de los bienes, y a la producción o no de daños. Los objetos han sido depositados en el Museo Arqueológico de Murcia a disposición del Juzgado de Instrucción número 9 de Murcia.