La Audiencia Provincial ha confirmado la sentencia de un juzgado de Cartagena que condenó a seis meses de prisión a una mujer por vulnerar la orden de alejamiento al acercarse a un barco anclado en el puerto de la ciudad en el que vivía su expareja.

Pese a conocer la prohibición que se le había impuesto -no acercarse a menos del denunciante-, acudió a las inmediaciones de la embarcación y, al verla, el hombre que había sido su pareja, optó por abandonar el lugar, «aunque ella, en reiteradas ocasiones, lo llamó por teléfono y le mandó mensajes de texto».

La sala concluye que está probado que la orden de alejamiento seguía plenamente en vigor, por lo que, al acercarse al barco, la acusada cometió el delito de quebrantamiento de medida cautelar por el que fue condenada.