Después de comprobar el absoluto y continuo mutismo con que nos tratan todos los medios televisivos nacionales al informar de los millonarios desplazamientos que los españoles realizaremos en las vísperas de los famosos 'puentes festivos'; donde se reitera, año tras año, las preferencias de los futuros viajeros, entre los cuales, casi nunca figura nuestra Región.

Habiendo anunciado en campañas millonarias que Murcia es hermosa y Murcia no typical y toda clase de calificativos aduladores de la capital y su huerta, pero anulando el nombre reconocido de 'Costa Cálida' ahora recuperado. Sus resultados no pueden ser más desalentadores, para el presente y el futuro de nuestras capacidades turísticas. Ahora la Comunidad encarga un costoso 'plan gastronómico regional' para intentar atraer turistas, como siempre, intentado vender la piel antes de matar a un esquelético oso.

Nuestras opciones turísticas capaces de consolidar un abundante y masivo turismo siguen pendientes de explotarse y difundir y están situadas en nuestras costas y en sus riquezas históricas y arqueológicas y la mayoría de ellas están en la Comarca del Campo de Cartagena.

Nadie pone en duda que la industria turística en nuestra Región seguirá retrasada mientras no contemos con comunicaciones ferroviarias modernas y variadas, así como tener un aeropuerto operativo las 24 horas del día. Nuestra consolidación como turismo de 'sol y playa' debe estar capitaneado por nuestro singular Mar Menor, que nos diferencia de otros destinos y que se complementaría con nuestra prolongada y variada fachada mediterránea de 205 kilómetros entre San Pedro del Pinatar y Águilas, la cual, en sitios muy concretos, está mal planificada, y en su mayoría sin planificar.

La por fin anunciada regeneración de la bahía de Portman y su Sierra Minera debe ser otro punto diferenciador turísticamente. Nuestra Región dispone de un pilar cultural, que nuestros competidores carecen en su mayoría: la riqueza patrimonial e histórica de Cartagena, sustentada en las diferentes épocas de su trimilenaria historia, la cual, incomprensiblemente, sigue pendiente de excavarse y ponerse en valor.

El desarrollo patrimonial de Cartagena, nos permitiría disponer en la Región de una gran ciudad declarada Patrimonio de la Humanidad, que sería un pilar fundamental, para complementar todas las vertientes turísticas y consolidar nuestras posibilidades futuras de ser Puerto Home. Los miles de viajeros actuales y futuros de los cientos de cruceros serían nuestra mejor campaña publicitaria, y sin costes.

Si el Gobierno regional y por tanto la consejería de Turismo no abordan de forma decidida estas posibilidades, seguirán frenando el desarrollo económico de la Región y seguirán dando palos de ciego en las deseadas y beneficiosas relaciones entre la Murcia regional y toda la Comarca del Campo de Cartagena, en la cual se fundamentan casi todas las posibilidades de crecimiento regional desde el punto de vista turístico.