Cuando despertó por la mañana en la habitación del Santa Lucía junto a su marido, ingresado por sufrir un infarto, se dio cuenta de que le habían robado todas sus pertenencias. Tras poner la denuncia acudió a su casa y se encontró con la ladrona en pleno robo. Forcejeó con ella y consiguió retenerla hasta que llegó la Policía para detenerla. El guión suma mayor dramatismo cuando la propia víctima narra que su hijo se encontraba durmiendo en la vivienda en el momento de los hechos.

Lo que parece el argumento de una película ocurrió la noche del pasado sábado en el hospital de Santa Lucía, cuando la visitante de un paciente de la planta de Cardiología entró en una habitación ajena para robar el bolso y el móvil a la mujer del paciente ingresado mientras ambos dormían.

La víctima, al despertar, salió al pasillo sin encontrar a médicos o guardas de seguridad, según contó ella misma a LA OPINIÓN. Llamó a la Policía, que le dijo que tendría que poner la denuncia. «Me indignó que no hubiera cámaras en los pasillos o en la planta que pudieran reconocer a la persona que me había robado, pero desde el hospital me dijeron que la Ley de Protección de la Intimidad del Paciente les obliga a preservar esas imágenes y sólo pueden tener las cámaras en zonas determinadas», dijo la víctima.

Tras presentar la denuncia y acudir a su casa se encontró con la ladrona apoderándose de sus joyas. En el forcejeo, el hijo que estaba durmiendo despertó y con la ayuda de un vecino consiguieron reducir a la delincuente hasta la llegada de los agentes, que acudieron de forma inmediata y detuvieron a la mujer para, una vez finalizadas las diligencias policiales, ponerla a disposición del Juzgado de Guardia.

Según cuenta la víctima, «tuvo que venir una ambulancia a tratarme una crisis de ansiedad y tanto los policías como los médicos reconocieron mi valor al enfrentarme a ella, pero como les dije, yo sólo hice lo que me pidió el cuerpo al saber que mi hijo estaba durmiendo apenas una habitación más allá».

Otros casos esclarecidos

Desde el hospital reconocieron que no era el primer hurto que se había producido en el centro, aunque tranquilizaron a los pacientes al afirmar que el circuito de cámaras había logrado ayudar a la detención de tres casos similares ocurridos con anterioridad. «Son casos aislados que tienen una respuesta inmediata», dijeron.