«Con ánimo de atentar contra su vida o asumiendo esta posibilidad, y aprovechándose de su superioridad numérica, física y de aislamiento del lugar a esa hora que disminuían las posibilidades de defensa o auxilio de Diego, procedieron a propinarle golpes, causándole la muerte por rotura de las vertebras del cuello para, a continuación, arrojar el cadáver al mar desde algún punto de la bahía». Así de rotunda se muestra la fiscal María Lendínez en su escrito de acusación en el que pide 20 años de prisión para cada uno de los cinco policías nacionales -eran seis aunque uno murió durante el periodo de prisión provisional- encausados en el caso Cala Cortina, al considerarlos coautores de sendos delitos de detención ilegal y homicidio.

El texto, al que ha tenido acceso LA OPINIÓN, apenas cuenta con dos hojas de acusación en las que la Fiscalía narra lo que a su entender ocurrió la noche del 11 de marzo de 2014, cuando Diego desapareció. Afirma el Ministerio Público que los agentes acudieron a socorrer al vecino de Las 600, que sufría «esquizofrenia paranoide y trastorno de afectividad que determinaba un grado de discapacidad del 45%», que estaba «asustado al sentirse amenazado por unos individuos».

La fiscal sostiene que los agentes cachearon a Diego, llegando uno de los policías a propinarle una bofetada, para luego, «de común acuerdo y con intención de atentar contra su libertad», indicarle «de manera intimidatoria» que se subiera al vehículo policial z-54 y le trasladaron a Cala Cortina.

El escrito también indica que ocultaron el traslado a la sala del 091 y a los agentes portuarios que se cruzaron en las inmediaciones de la playa cartagenera, a la que llegaron con las luces de posición del puente superior de los vehículos apagadas. Una vez en el lugar golpearon a Diego hasta su muerte y lanzaron su cadáver al mar, siempre según la Fiscalía.

Por ello, Lendínez pide para los cinco acusados 6 años de prisión por un delito de detención ilegal y 14 por otro de homicidio, con la agravante de abuso de superioridad y aprovechamiento de las circunstancias de tiempo y lugar. Asimismo, solicita que los encausados indemnicen a la hija de Diego con 200.000 euros y a cada uno de sus cinco hermanos con 30.000.

Más de 4.353 folios

Con el escrito de acusación de la Fiscalía en el Juzgado, ahora hay que esperar a que tanto la acusación particular como las defensas entreguen sus conclusiones provisionales, que se añadirán a los 4.353 folios que ya componen la causa. Pese a que se desconoce aún la fecha del juicio, sí que ha trascendido que contará con un tribunal del Jurado y que además de las declaraciones de los cinco procesados deberán comparecer, a petición de la fiscal, más de 70 personas entre testigos, familiares, policías y peritos.