Los amigos de lo ajeno han robado en la iglesia de San Diego mientras el sacerdote oficiaba la misa. Ocurrió el viernes en la eucaristía de la tarde. «Sólo estaba abierta la eucaristía y yo estaba dando la misa en la capilla pequeña. Debió ser entre las 19.15 y las 19.30. Entraron en la sacristía y se llevaron el dinero de la cartera del sacristán, unos 30 euros, y el ordenador desde el que se activa el sistema de megafonía en el templo», señaló Joaquín Ferrando, el sacerdote, quien ya ha cursado la correspondiente denuncia.