Los vecinos de Alumbres han dado la voz de alarma a primera hora de la tarde por una gran nube negra que procedía de la refinería de Repsol en Escombreras sin conocer sus causas.

Pese a unos primeros instantes de alerta -la columna de humo se podía divisar incluso desde La Manga, según fuentes consultadas- desde la empresa han llamado a la tranquilidad, aunque han precisado que entendían la preocupación de los residentes en Alumbres.

Y es que, según ha reconocido desde la propia compañía, el problema ha surgido de un fallo en el suministro eléctrico, que ha provocado el paro en la refinería. Como consecuencia de esta circunstancia se ha activado un protocolo de seguridad para volver a recuperar la carga de trabajo.

Así, las unidades del complejo se han puesto de nuevo en marcha de forma paulatina y de menor a mayor potencia -así lo dicta el protocolo- para recuperar su trabajo.

"No existe ningún peligro, aunque es muy visible", han dicho desde Repsol, que también ha reconocido la actividad de sus chimeneas para evitar contaminación medioambiental. "Las chimeneas están trabajando para quemar los gases que se producen en las unidades y que deben eliminarse de esta forma para que no lleguen a la atmósfera", han afirmado las fuentes consultadas.

El fallo en el suministro se ha producido sobre las 16.30 horas y en apenas dos horas ya ha comunicado la empresa que estaba todo bajo control y que no existía ningún riesgo para los vecinos de Alumbres o Cartagena.