­Los trabajadores de una planta de Alumbres dedicada al reciclaje de aceite usado se encerraron el pasado martes durante cinco horas en el interior de su fábrica para exigir que ésta vuelva a ponerse en marcha tras dos expediente de regulación de empleo temporal (ERTE). La empresa, denominada Sertego, es filial de la compañía Urbaser que, a su vez, pertenece a la constructora ACS, cuyo mayor accionista a día de hoy es Florentino Pérez, presidente del Real Madrid.

En total hay una veintena de empleados afectados por este ERTE que se inició antes del verano del año 2013. Según la compañía, el motivo de los cierres puntuales de la factoría se debe a falta de materia prima para su puesta en funcionamiento. Sertego tiene otras tres plantas en España funcionando con normalidad, situadas en Huelva, Madrid y Logroño.

Dos años con el cuerpo muerto

Uno de los operadores de planta afectados por esta situación afirmó tras el encierro que «Sertego nos dice que la factoría no es rentable porque sale más caro traer el aceite usado que importan desde Portugal o Francia hasta Cartagena que al resto de plantas». Mientras, el asalariado lamenta que «llevamos dos años con el cuerpo muerto en casa sin nada que hacer y solo nos han llamado para que trabajemos un par de meses, de febrero hasta mitad de abril».

Durante el tiempo que los operarios están sin trabajo la empresa les da un ayuda mensual que ronda los 200 euros, cifra que aumentaría ligeramente con la última propuesta de Sertego que han rechazado los empleados. Además, cobran adicionalmente cada mes el correspondiente paro que se les acabará en agosto. Sin embargo, según el delegado sindical Juan Marín, «preferimos el despido y que nos paguen lo que corresponda -entre 10.000 y 20.000 euros- a la situación que vivimos y, así, cuando la empresa decida volver a abrir que nos llame para trabajar». Marín también critica que «los motivos que Sertego expone para hacer el ERTE son únicamente por cuestiones logísticas, cuando la realidad es que se produce por temas económicos». Sobre ello, desde Sertego indican que «no se puede hacer esa operación ya que al ser trabajos cualificados es difícil encontrar a trabajadores preparados».

Por su parte, el responsable de área de la empresa Sertego, Santiago Carejero, anuncia que «tenemos un compromiso con los trabajadores de Cartagena y, de hecho, ya hemos recolocado a dos de ellos en otras plantas de la compañía». Asimismo, Carejero explica que «los ERTE que nos han costado más dinero que hacer un ERE y liquidar la fábrica». Igualmente destaca que «no queremos que la gente pierda sus puestos de trabajo porque consideramos que la factoría puede ser rentable de aquí a un tiempo».