­El tercio de Granaderos de la Cofradía Marraja rindió este domingo homenaje a su héroe más ilustre, el granadero Martín Álvarez, quien tuvo un papel más que significativo en la batalla del Cabo de San Vicente el 14 de febrero de 1797.

Los Granaderos marrajos recuerdan a este soldado de Infantería de Marina desde 1986 debido a que pasó a formar parte de la historia de la Armada por su defensa de la bandera española cuando los británicos abordaron el buque San Nicolás.

«Nuestra agrupación es la única que rinde un homenaje a la Armada y lo hacemos en la persona de Martín Álvarez», indicó su presidente, Tomás del Pozo.

Pero la jornada de esta agrupación marraja comenzó bastante antes, concretamente a las nueve y media de la mañana, cuando celebraron la misa de cumplimiento pascual en la Iglesia de Santo Domingo tras la cual se inició un desfile que terminó a las once de la mañana en la plaza del Rey, donde hicieron un pequeño parón para reponer fuerzas.

Después de la pausa para el desayuno, el tercio volvió a formar para dirigirse a la plaza de Héroes de Cavite, donde tuvo lugar el tradicional homenaje a Martín Álvarez y la entrega de la corona de laurel.

Posteriormente, los miembros de la agrupación visitaron la Iglesia de Santa María de Gracia para realizar una ofrenda floral a la antigua patrona de la ciudad, la Virgen del Rosel, así como el Gobierno Militar, el Arsenal y el cuartel de la Guardia Civil.

El clima acompañó en esta ocasión y permitió que más de un centenar de cartageneros acudieran a la cita con los Granaderos marrajos, que ya se ha erigido como una tradición para el tercer domingo de Cuaresma.