La consejería de Sanidad señaló ayer que respeta a todas las personas que se manifiestan por las razones que sean, pero insiste que el Rosell es un hospital abierto en el que hay una gran actividad y es un refuerzo estupendo para el magnífico y moderno Santa Lucúa, que ha implantado nuevos servicios que no existán en la ciudad, con la tecnología más avanzada y que ha evitado los numerosos traslados que antes había que hacer a Murcia, comentó un portavoz.

Asimismo, señaló que la reorganización sanitaria que se ha llevado a cabo en Cartagena tiene como objetivo la mejor atención para los ciudadanos y recalcó que la ciudad portuaria tiene la ratio de camas por paciente más alta de la Región. «Somos los primeros en defender la sanidad pública», concluyó.