Un estudio topográfico de la ciudad ha permitido dibujar aquellas zonas donde el suelo permite una mejor edificabilidad y los lugares más propensos a las inundaciones. Es una de las conclusiones del proyecto Arquetopos que un grupo de investigadores de las Universidades de Murcia y Cartagena han desarrollado durante los últimos tres años con financiación estatal. El equipo, dirigido por el catedrático y arqueólogo Sebastián Ramallo presentó ayer los resultados de todo el proyecto en el museo del Teatro Romano, desvelando asimismo la evolución topográfica de la ciudad desde el año 13.000 a. de C. a la era actual.

«Son muchas las aplicaciones que se pueden dar a estos datos, pero una es la de mostrar al Ayuntamiento qué zonas son las que mejores condiciones tienen para la construcción y cuáles cuentan con problemas debido a fangos que permanecen en el subsuelo y que harían los edificios inestables o propensos a las humedades en sus sótanos», afirma Ramallo, quien precisa que «hay zonas del Ensanche en las que hemos encontrado franjas de hasta 12 metros de fango a escasa profundidad».

Pero más allá de sus aplicaciones sobre el avance constructivo de la ciudad, el proyecto ha conseguido «fijar una base científica sobre cómo ha evolucionado la ciudad en los últimos 15.000 años», dice el catedrático. «Ahora no trabajamos con hipótesis, sino que conocemos cómo ha cambiado la morfología de la ciudad desde la prehistoria, cómo hace 13.000 años la dársena estaba casi seca, cómo hace 6.000 años la ciudad casi estaba sumergida y cómo ha ido desapareciendo otra vez el agua», añade Ramallo.

La base han sido más de 300 sondeos realizados por toda la ciudad que han permitido incluso poner en duda la historia. «Hemos visto cómo la laguna, en época de Escipión, contaba con un escalón que hubiese hecho muy difícil que las legiones la atravesaran a pie, como siempre se ha creído», afirma el arqueólogo.

Asimismo, el estudio también ha permitido fijar todas las necrópolis romanas de la ciudad, así como preparar maquetas en tres dimensiones sobre la morfología de la ciudad a través de la historia para exponerlas en los centros de interpretación.