La Federación vecinal ha exigido al ayuntamiento de Cartagena que paralice «el desmantelamiento sistemático del alumbrado público en la zona oeste» y que repongan las farolas eliminadas «sin justificación alguna».

Alrededor de unos 200 residentes y las asociaciones del entorno han solicitado al colectivo vecinal amparo y ayuda, ya que «se sienten indefensos y ninguneados por parte del Ayuntamiento puesto que en numerosas ocasiones han exigido una solución a este problema», dice la Federación.

El colectivo asegura que los residentes «lo han demandado en repetidas ocasiones a la Junta Vecinal y se ha tratado el tema en el pleno de la misma, sin que pasado haya respuesta, constatándose una vez más la inutilidad de las juntas vecinales». De esta forma, también se han presentado sendos escritos tanto al concejal de Infraestructuras como al de Descentralización, incluso a la propia alcaldesa, obteniendo el mismo resultado, según los vecinos.

Desde la Federación afirman no entender el por qué de esta situación, ya que «dicho alumbrado público fue contratado en el proyecto de alumbrado público en la zona rural de Perín, con un presupuesto de 120.000 euros, para ahora desmantelarlo, pudiendo incurrir el Ayuntamiento en un mal uso del dinero público».

El colectivo va más allá y denuncia que la falta de luz conlleva, sobre todo en lo que respecta a la inseguridad ciudadana, un grave peligro en una zona que «está siendo castigada por los robos con violencia».

Así, por lo anteriormente expuesto, la Federación celebrará a primeros de septiembre una reunión de urgencia con todas las asociaciones de vecinos y personas implicadas, a fin de adoptar las medidas necesarias para tratar de obligar al Ayuntamiento a dar respuesta a «algo tan esencial como es el disponer de un mínimo alumbrado público que haga que la vida de los vecinos y vecinos de la zona sea segura».