En plena situación económica adversa, que ha provocado la extinción de tres grupos festeros -Templo de Baco, Tribunos de Roma y Discípulos de Esmún- e inmersos en la polémica decisión de la Legio II Navalis de escindirse de la Federación de Tropas y Legiones, el montaje del Campamento festero ha traído nuevos aires de sosiego y calma a púnicos y romanos. Y es que, los dos nuevos grupos creados este año para participar en las fiestas históricas -Legio XV Harpastum y Legio III- ya han colocado los 'cimientos' sobre los que se sostendrán sus respectivos cuarteles durante los festejos que comienzan el próximo viernes.

Una primera toma de contacto que ha sido dispar en los dos casos. Así, la Legio XV Harpastum ya contaba ayer con gran parte de su campamento montado en la parcela 27 del recinto, en la Vía Escipión, donde estaba ubicada estos años pasados Collegium Consulum Imperatorum, que ahora ocupa la parcela 16, antiguo espacio de Templo de Baco. La fachada del nuevo grupo cuenta con apenas cinco columnas medias que dejan una puerta abierta para el acceso al recinto. El interior cuenta con una carpa que cubre el campamento y sirve de protección para los más que probables días de lluvia durante los festejos.

Por otro lado, la Legio III apenas ha avanzado en su montaje y sólo cuenta en su parcela, situada en el número 12 del recinto, antiguo espacio de Tribunos de Roma, con una carpa y dos líneas de brezo a modo de separación con la vía.

No obstante, hay que recordar que estos dos grupos han sido creados este mismo año y debido a las dificultades económicas y al poco tiempo de organización, tanto sus cuarteles como sus trajes y complementos serán modestos pero acordes con la historia que se representa durante diez días en la ciudad.

Miembros de ambas legiones ya han confirmado que la idea es ir creciendo conforme puedan acometer mayores inversiones tanto en su vestuario como en sus recintos. El primer paso ya lo tienen dado y es que cuentan con un buen número de socios -la Legio XV Harpastum suma alrededor de 70 componentes y la Legio III cerca de 60-.

Una situación económica que ha provocado que el resto de cuarteles del recinto, los ya veteranos, apenas hayan sufrido modificaciones con respecto a otros años, aunque no faltan las nuevas capas de pintura, los retoques en columnas y esculturas o pequeñas novedades ornamentales e internas.