La prostitución no es un problema que se haya de afrontar con soluciones generales, sino que se debe combatir persona a persona. Esa es al menos la opinión que expresó ayer el concejal de Atención Social, Atención Social, en su intervención en el congreso que se celebra en hotel Los Habaneros de Cartagena.
Calderón anunció que el Ayuntamiento y Cruz Roja está colaborando en la elaboración de un estudio sobre la prostitución en Cartagena y desveló que una de las primeras conclusiones que han podido constatar es que la práctica totalidad de las mujeres que ejercen esta actividad lo hacen para cubrir sus necesidades básicas. Asimismo, el estudio, que áun está en proceso de elaboración, también ha certificado que en torno al ochenta por ciento de las prostitutas que ejercen en las calles de Cartagena son inmigrantes con escasos recursos.
El concejal de Atención Social comentó que estas conclusiones hacen que desde su departamento se aborde el problema tratando de que cada una de estas mujeres disponga de medios y posibilidades para abandonar la prostitución. «Tiene los medios que ponemos al alcance desde el Ayuntamiento para las personas sin recursos y tratamos de concienciarles de que prostiuirse no es una buena salida», subrayó.
Antonio Calderón también abordó como el rechazo social que genera la presencia de las prostitutas en la calle afecta a los comerciantes que tiene sus establecimientos en las zonas en las que se instalan y a los vecinos que residen en las proximidades.
