El S-80 ya navega, aunque no por los mares, sino en la imaginación del equipo de Navantia que desarrolla el sumergible y ha recreado virtualmente la nave frente a las costas de Cartagena o en inmersión, como se aprecia en las imágenes que acompañan esta información y gracias a las posibilidades que ofrecen las nuevas tecnologías.

El primer submarino de diseño exclusivamente español, del que la factoría de Navantia en Cartagena, construye cuatro unidades para la Armada española, no será una realidad hasta el año 2013, cuando la empresa pública de construcción naval entregue el primero de ellos, el S-81, a Marina.

De momento, Navantia ya ha puesto la quilla del primer sumergible y presentado públicamente la primera sección. Además, ha empezado a cortar las cuadernas de la segunda nave. Y es que el astillero de Cartagena se ha transformado y se ha convertido en una auténtica fábrica de sumbarinos en serie.

Lo que no se conoce todavía son los nombres con los que se bautizarán a los nuevos submarinos, aunque sí existe una petición oficial por parte de la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno para que al primero de ellos se le llame marrajo y que al resto se les pongan nombres de otro tipo de tiburones, como tintorera. Hasta el momento, la Armada no ha tomado ninguna decisión en este sentido.

Lo que sí es evidente, es que si Isaac Peral levantara la cabeza, probablemente se sentiría orgulloso de ver cómo su ciudad natal, la cuna del invento del submarino, sigue siendo referencia mundial en la fabriación de sumergibles.