Los ladrones de viviendas han elegido este verano actuar en zonas de costa como Cabo de Palos, donde en ocho días se han cometido al menos tres robos en otras tantas casas. El riesgo añadido es que los asaltantes entran en los domicilios cuando sus ocupantes están durmiendo.

Uno de los primeros robos que han trascendido se cometió la semana pasada en la urbanización El Mirador, en Cala Flores. Ocurrió minutos antes de las dos de la mañana. La inquilina de la vivienda se despertó de repente "no porque hubiera escuchado ruido alguno, sino porque noté como una presencia", relata Ángeles. De inmediato recorrió la casa hasta que se encontró frente a frente con los ladrones. "Eran morenos, uno era delgado y con el pelo corto y el otro más fornido. Yo comencé a gritar llamando a la Policía y tirándoles lo que tenía a mano. Se miraron y salieron por la mismA ventana por la que había entrado", asegura la mujer. En ese momento también estaban en la vivienda su marido y sus hijos, de corta edad. El segundo robo ocurrió apenas unos días después en la misma urbanización. En este caso, los ladrones entraron en una vivienda cuyos ocupantes son suecos, como muchos de los que viven en El Mirador.

"Se llevan objetos como cámaras de video y de fotografía, ordenadores personales, reproductores de mp3, joyas y dinero. Todo aquello de pequeño tamaño y de valor que quepa en una bolsa grande de deportes", aseguró una de las afectadas.

Esa misma noche, pero en otra urbanización que apenas dista 50 metros de El Mirador, los ladrones aprovecharon el sueño de una mujer para entrar y llevarse todo lo que había de valor y que estuviese a mano.

Los ladrones no sólo actúan en zonas de acceso fácil, sino que no tienen problemas en descolgarse desde un tercer piso para acceder a la vivienda elegida. Al parecer los autores de los robos son extranjeros, aunque las víctimas que los han escuchado no han podido precisar qué acento tenían. "Además son muy ágiles, cuando salieron de la casa pegaron un salto hacia la ventana desde una distancia de unos dos metros", aseguran las fuentes citadas. La Guardia Civil de Cabo de Palos ha sido la que ha recibido las denuncias por estos hechos, a las que podrían sumarse otras sobre robos cometidos con anterioridad que no se han hecho públicos.

Los vecinos están desconcertados "porque nunca han robado con la gente dentro de las casas", aseguran.