Cualquier cita deportiva de la dimensión que ha adquirido la Carrera de la Mujer necesita detrás muchas manos para poder sacarla a flote. En esta ocasión, la organización ha contado con la colaboración de muchos jóvenes que han llegado desde diferentes destinos que han puesto todo el corazón en los días previos y también durante la jornada final.
Durante tres intensos días, alumnos de la Universidad de Murcia que llegaron a través del grupo Umusport y la Unión de Federaciones Deportivas de la Región de Murcia coordinados por Salva Angosto, las jugadoras del club Cuder Rugby Murcia, pionero en España por su apoyo al deporte femenino, y el TAFAD Samaniego de Alcantarilla, así como otras personas que se han vinculado a nivel individual como Marina López y Javier Puche, desarrollaron un trabajo encomiable, entregando los dorsales en El Corte Inglés, donde todo su personal se volcó con todos ellos, especialmente Pepe Belmonte, que no dejó en ningún momento de cuidar de todos los detalles y de que esos voluntarios se encontraran cómodos.
Sin ellos, sin duda, sería imposible llevar a cabo una carrera que ha conseguido un gran calado social. Todos han puesto el corazón y han sido, sin duda, el pulmón, manteniendo siempre la sonrisa aunque tuvieran que mover cajas, montar bolsas de la corredora o colocar vallas en el recorrido, como ocurrió en la mañana de ayer en la Avenida Juan Carlos I.
Por todo ello, durante la entrega de premios, las participantes tributaron a los voluntarios una cerrada ovación, a los que la organización agradece eternamente la colaboración prestada, esperando que disculpen los errores.
