La Segunda etapa del Circuito Mundial de la Eternal Ruunning se celebró ayer en Águilas, con la participación de más de 2600 "invencibles", de los cuales muchos, que tanto individuales como en grupo, dieron el color de fiesta a la prueba presentándose disfrazados.

La prueba comenzó a las once de la mañana, teniendo que superar 80 obstáculos y recorrer 10 kilómetros por la ciudad, pasando por las dos bahías del casco urbano, teniendo que meterse en la mar, cruzar por bajo el monte del Castillo de San Juan de las Águilas, por las arenas de la playa de Levante y de Las Delicias, y adentrándose en caminos de tierra, campo a través y asfalto, hasta llegar al aparcamiento de tierra del Polideportivo Municipal, que se había convertido en una gran pista americana, la cual tuvieron que realizar los participantes, como parte final de la prueba, y con las fuerzas físicas muy mermadas. Balas de paja, contenedores, llenos de agua, neumáticos, zonas con descargas eléctricas, toboganes gigantes, eran algunas de las dificultades que tuvieron que superar los participantes.