Sacando a la calle más de una decena de carrozas, con una principal, y convirtiendo el desfile en una gran feria de atraciones, ha logrado el Premio Excelentísimo Ayuntamiento de Águilas a lo Mejor del Carnaval 2020 la peña Pizarrón. Así se determinó ayer tras una semana de fiesta que empezó tras los Cambios de Poderes y la Suelta de la Mussona.

El jolgorio y la música invadieron las calles aguileñas durante todas las jornadas y en los desfiles volvieron a demostrar por qué esta fiesta no tiene límites, sacando por la Avenida Juan Carlos I y la calle Rey Carlos III un derroche de imaginación, fantasía, colorido y coreografías. Siendo recibidos al final de cada desfile por el Monumento al Carnaval, un Ícaro que se tiene que sentir orgulloso de lo que sus carnavaleros son capaces de hacer. «La imaginación no necesita dinero, los aguileños lo sabemos, por eso somos capaces de sacar estos carnavales a la calle», comentaba a esta Redacción el presidente de la Federación de Peñas del Carnaval, José Alonso, quien ya tiene preparadas una serie de novedades para el año que viene.

Ayer fue el último desfile de este año, la última oportunidad que les dio Doña Cuaresma a los carnavaleros para disfrutar de esta fiesta de Interés Turístico Internacional, y los carnavaleros no la desaprovecharon; disfrutaron del desfile tanto como las más de 25.000 personas que lo vieron en directo, según fuentes municipales. No quedaba en la ciudad un hueco para aparcar o ver el últmo desfile de un carnaval por el que han pasado 500.000 personas, según el edil de seguridad ciudadana, Tomás Consentino: «Estamos hablando de un cifra de medio millón de personas y, lo más importante, sin ningún tipo de incidentes destacables hasta este momento», dijo Consentino al terminar el desfile.

El Ballet Oficial de la Federación de Peñas fue el que descorchó la alegría del desfile, que una vez más demostró por qué es uno de los principales escaparates del carnaval aguileño. Tras ellos, los Personajes del Carnaval infantiles y adultos, se bajaron de sus carrozas para vivir el desfile a pie de calle.

Las peñas aguileñas convirtieron el sambódromo aguileño en un gran teatro en la calle, un espectáculo en el que tenía cabida cualquier temario: la ironía de La Rata Loca con el Vaticano como carroza para dar luz verde al desfile veraniego LGTBI, Si No Salgo Reviento o La Clanka; las interactivas y multitudinarias Matalentisco Boy's o Pizarron, convirtiendo el desfile en una gran feria de atracciones; El Tangay, con más de cien componentes, un temario de piratas con un gran barco que se hundía por la popa como carroza principal y dos carros con las figuras de piratas de cinco metros de altura; o el musical con sus coreografías y elegantes diseños de peñas como Nuevo Ritmo, Azabache -con cien componentes de distintas edades-, Ipanema, el colorido y ritmo caribeño de Almendriqueña, la salsera Agualine, Sumatra, Kambalaya, la futurista Terpsicore o la lucha musical de las sirenas y neptunos de Serpentina.

Tras el desfile, la noche continuó en la playa de la Colonia con la tradicional Quema de Don Carnal, que sentenciaba la victoria de Doña Cuaresma; ya metidos en la madrugada, se realizó la entrega de premios de este Carnaval de Águilas 2020. Una relación de premiados que se puede consultar en la web de LA OPINIÓN.