Las comparaciones entre el maravilloso film de Roberto Benigni, que se alzó con el Óscar a Mejor Película Extranjera pero no con el de Mejor Película en los años anteriores a 'Parásitos' en los que nadie imaginaría otra posibilidad, y este 'juego' que ha tenido que inventar un padre sirio para que su hija no sufra "crisis psicológicas" por los bombardeos que les acosan constantemente.

Y es que junto al resto de miembros de su familia forman parte de las millones de personas que se han visto desplazadas por el conflicto sirio desde que comenzase la guerra. Ellos, en concreto, se han trasladado de Sarakib a Sarmada, aunque a juzgar por las imágenes no ha sido suficiente, por lo que Abdullah, que así se llama este padre, ha tomado la decisión de 'camuflar' la horrible situación por la que su hija de tan sólo 4 años está teniendo que pasar junto a varios miles de menores del país.

Ha decidido convencer a su hija de que todo es un juego y de que cada vez que cae una bomba, lo que debe sentir es alegría. "Los niños están teniendo crisis psicológicas por los bombardeos. Intento que los vean como motivo de felicidad y no de miedo", explicó a la agencia turca Anadolu.