Cada vez son más municipios los que prohíben la utilización de animales en ferias y espectáculos. Dentro de este tipo de actividades, podemos referirnos a las cabalgatas de Reyes. Los animales utilizados sufren el estrés de encontrarse en pleno casco urbano, rodeados de multitudes, ruidos, con una iluminación excesiva y transitando por la calzada, una vía que no está adaptada a su naturaleza -algunos sufren lesiones físicas como consecuencia de transitar por la ciudad-. Todo esto genera un terrible sufrimiento a los animales.

Precisamente, las Comisiones de Protección de los Derechos de los Animales de los Colegios de Abogados catalanes y de Baleares han instado a los ayuntamientos a dejar de utilizar animales en las cabalgatas de Reyes. La razón estriba, no sólo en el estrés que sufren los animales, sino en el evidente malestar y rechazo que genera en gran parte de la población.

Utilizar animales en este tipo de celebraciones entra en evidente contradicción con los valores cada vez más consolidados de protección y respeto a los animales como seres dotados de sensibilidad, un estatus reconocido no sólo en el TFUE sino también en la Proposición de Ley de Reforma del Código Civil que más pronto que tarde esperamos que sea una realidad.

Todos podemos contribuir a acabar con la utilización de animales en cabalgatas trasmitiendo al ayuntamiento de nuestro municipio nuestro rechazo, así como las alternativas perfectamente asumibles que pueden garantizar la diversión para las personas que asisten a este espectáculo.

Hagamos todos un esfuerzo por vivir unas navidades en las que prime el respeto hacia todos, incluidos los animales.