Igualdad, derechos, libertad auténtica, progreso, convivencia y concordia. Estas son las seis grandes palabras que para mi definen estos 40 espléndidos años de las primeras elecciones democráticas que cumplimos en 2019. Son los más importantes logros ya consolidados que este país ha conseguido, gracias al esfuerzo, sacrificio, compromiso, a veces vital, y mucho trabajo que supuso esta rica etapa de la historia española.

Ha sido una etapa histórica no solo para Archena sino para toda la Región. Yo no había nacido aún, pero soy consciente de la dificultad y el riesgo y la labor inconmesurable que supuso esta etapa inicial de nuestra democracia municipal para quienes la hicieron realidad. Por tanto, todos los homenajes y reconocimientos a estos personajes y primeros responsables de los nuevos ayuntamientos y regiones autónomas son y serán muy escasos para lo que en realidad se merecen.

Progreso, modernidad y un municipio ampliado con más, mejores y cómodas infraestructuras, acorde con otras importantes y estratégicas localidades de nuestra Comunidad Murciana, es lo que ha conseguido Archena. Y hablo del nuevo y completo Centro de Salud, del nuevo IES Vicente Medina o los nuevos colegios Miguel Medina y Río Segura, las completas infraestructuras deportivas, los nuevos puentes sobre el río y por consiguiente las nuevas circunvalaciones y accesos, el Centro de Personas Mayores, el amplísimo Polígono Industrial de La Capellanía, parques infantiles y de ocio, el extenso, segundo de la Región, paseo ribereño, el nuevo Teatro Villa de Archena, el Museo, remodelación de importantes avenidas y vías principales, renovación de toda la luminotecnia pública del municipio, con exclusivas características medioambientales, son sólo algunos pocos ejemplos de las aseveraciones iniciales de progreso y modernidad y cómoda convivencia con las que hemos convertido a nuestro pueblo en los últimos años democráticos, gracias a las libertades, derechos y autonomías ordenadas, que nos ha dado nuestra Carta Magna, a la que debemos defender, proteger y custodiar para que perviva cada vez con más fuerza y vitalidad nuestra democracia, en la etapa quizás más importante de la historia de Archena, de la Región de Murcia.

Hablo con mayúsculas de mis predecesores: José Marín Alcolea, que incluso abrió esta etapa democrática, siendo el último que la cerró en plena guerra civil; de Nicolás López Ayala, diez años desde 1981, en unos años ya iniciados de libertades, pero todavía llenos de muchas dificultades. Elías Peñalver, que estuvo rigiendo los destinos municipales hasta 1995. Y continuó Manuel Marcos Sánchez Cervantes, quizás la etapa más prolongada en el tiempo, pues 16 años dirigiendo el municipio es toda una labor que se le reconoce, y esta alcaldesa que firma, que desde 2011, los archeneros por mayoría en tres ocasiones ininterrumpidas han preferido que dirija esta Alcaldía de nuestro pueblo, cinco veces centenario.