Las manchas en la piel son marcas que saltan a la vista, especialmente tras los meses más soleados del año. Éstas se producen por una distribución diferente de la melanina y los melanocitos.

En la mayoría de los casos, las manchas en la piel únicamente suponen un problema estético. Sin embargo, algunas otras deberían vigilarse para que no se conviertan en un melanoma.

Estas son las manchas en la piel más comunes y sus tratamientos.

Las pecas son pequeñas acumulaciones de pigmento de color marrón que suelen aparecer en las zonas más expuestas al sol, como la cada el cuello o los brazos, intensificándose con la exposición solar. La predisposición a tener pecas es genética, pero en general se dan en personas de piel blanca y cabello claro, especialmente pelirrojos.

Este tipo de manchas en la piel no supone ningún peligro para la salud, pero si son muy molestas estéticamente pueden disimularse o eliminarse con una crema blanqueadora, un peeling químico o con láser.

Los lunares son acumulaciones de melanocitos con bajo nivel de malignización. El control de los lunares es especialmente importante, aunque normalmente sólo se tratan si existe alguna sospecha de alteración histológica (cambios de coloración, bordes irregulares, crecimiento, etcétera). Los lunares pueden localizarse en la dermis, la unión dermoepidérmica o en ambas zonas.

Los lunares comunes no necesitan ningún tipo de tratamiento, a no ser que se conviertan en un melanoma. Sim embargo, al igual que con las pecas, si se trata de un problema estético puede extirparse en un centro médico.

Los lentigos son manchas de color marrón, un poco más grandes y oscuras que las pecas. Pueden aparecer en cualquier parte del cuerpo y no tienen por qué estar relacionadas con la exposición solar. Su tamaño varía desde los pocos milímetros hasta los 2 centímetros.

Los lentigos solares suelen tener un color más oscuro que los lentigos simples. También llamadas hiperqueratosis seniles, estas manchas de la piel aparecen en zonas sobreexpuestas al sol como la cara, el escote, las manos o los antebrazos.

Este tipo de manchas de la piel, tanto los lentigos simples como los solares, se pueden eliminar con láser.

El melasma aparece casi exclusivamente en mujeres. Este tipo de mancha en la piel, de color marrón claro, se suele agravar durante el embarzo, con la menopausia o la toma de anticonceptivos. El melasma suele aparecer en la frente, las mejillas y otras zonas de la cara.

Si sufres de melasma, puedes eliminar este tipo de manchas con cremas despigmentantes o láser.

El vitiligo es una enfermedad degenerativa cutánea que provoca la desaparición de la pigmentación de la piel. En general el vitiligo se traduce como la aparición de manchas blanquecinas y bien delimitadas en la piel, especialmente alrededor de los ojos, nariz, boca, en las manos y las piernas. Aunque su origen parece ser auntoinmune, en ocasiones se le ha relacionado con enfermedades tiroideas.

El melanoma, también llamado cáncer de piel, es de sobra conocido. Este tipo de mancha en la piel es un tumor maligno que puede confundirse con un lunar. Visita a tu médico si notas que esta mancha crece progresivamente, tiene bordes irregulares o una pigmentación excesiva en varias zonas.

El melanoma es ya uno de los tipos de cáncer más frecuentes en nuestro país y su detección tiempo es clave para superar la enfermedad. Si crees que puedes sufrir un melanoma, acude inmediatamente a tu médico.