La tuberculosis afectó en 2014 a 9,6 millones de personas y causó 1,5 millones de muertes, según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que no obstante celebra que la mortalidad se ha reducido un 47% en los últimos 25 años, desde el año 1990.

Con motivo del Día Mundial de la Tuberculosis que se celebra este jueves, 24 de marzo, calcula que entre los años 2000 y 2014 se han salvado 43 millones de vidas gracias a los "avances significativos" en el diagnóstico y tratamiento de esta enfermedad, de ahí que anime a todos los países a seguir trabajando para "poner fin" a la tuberculosis en el año 2030 como han propuesto en uno de los Objetivos del Milenio.

De hecho, pese al descenso de la mortalidad, este organismo de Naciones Unidas reconoce que por el momento "la batalla sólo se ha ganado a la mitad" ya que cada día se siguen registrando más de 4.000 muertes por esta enfermedad infecciosa, que sobre todo afecta a las poblaciones más pobres y vulnerables.

La tuberculosis es junto al VIH la enfermedad infecciosa con más muertes a nivel mundial. Más del 95 por ciento de las muertes se producen en países de bajos y medianos ingresos y está entre las cinco principales causas de muerte en mujeres de 15 a 44 años. Además, se estima que en 2014 un millón de los casos de tuberculosis se dieron en niños, causando unas 140.000 muertes.

La residencia a fármacos, otro desafío "crítico"

La OMS también ha recordado que otro de los desafíos críticos que requiere "medidas y urgentes" es la resistencia que en muchos pacientes desarrolla la enfermedad a los antibióticos más habituales, un problema que según datos de 2014 afectaba a unos 480.000 personas ene el mundo.

Del mismo modo, recuerda que esta enfermedad es la principal causa de muerte en personas con VIH, siendo responsable de uno de cada tres fallecimientos en estos pacientes (380.000 en 2014).

El objetivo de la estrategia de la OMS 'Fin TB' es reducir las muertes por tuberculosis en un 90% y los nuevos casos un 80 por ciento entre los años 2015 y 2030, así como garantizar que ninguna familia que se vea afectada por la tuberculosis tenga que hacer frente a los costes asociados a esta enfermedad.

Y reconocen que su erradicación "sólo será posible" con una mayor colaboración dentro y fuera de los gobiernos, con la sociedad civil, el ámbito investigador, el sector privado y las organizaciones no gubernamentales.

30 países sufren el 85% de la carga global de la efermedad

Además, la OMS también ha celebrado que los mayores esfuerzos se están produciendo en los 30 países con las tasas más altas de afectados que, de hecho, asumen más del 85 por ciento de la carga mundial de la enfermedad.

Los 20 países con mayor número de nuevos casos de tuberculosis al año son Bangladesh, Brasil, China, Corea del Norte, República Democrática del Congo, Etiopía, India, Indonesia, Kenya, Mozambique, Myanmar, Nigeria, Pakistán, Papua Nueva Guinea, Filipinas, Rusia, Sudáfrica, Tailandia, Tanzania y Vietnam.

Sin embargo, los países con una mayor incidencia de casos y al menos 10.000 nuevos contagios al año son Angola, Camboya, República Centroafricana, Congo, Lesotho, Liberia, Namibia, Sierra Leona, Zambia y Zimbabwe.

Entre los avances que se han producido la OMS destaca los de la India, donde han catalogado la enfermedad de declaración obligatoria y ha propiciado que los nuevos casos crecieran un 29 por ciento sólo en 2014; o los de Sudáfrica, donde se ha ampliado el uso de una prueba de diagnóstico molecular que permite detectar la enfermedad.