El 10% de los embarazos son de alto riesgo debido al aumento de la edad materna del primer embarazo, ya que en este tipo de gestaciones aparecen factores externos o intrínsecos a la mujer embarazada que pueden producir complicaciones durante la gestación, el parto y el puerperio, además de condicionar la salud del recién nacido. Cada día 1.000 mujeres pierden la vida en el mundo por causas relacionadas con el parto y 5.500 recién nacidos mueren en su primera semana de vida por no tener atención adecuada por profesionales especializados en la atención a la mujer y al bebé.

Factores de riesgo

La edad media del primer embarazo ronda los 31 años, mientras que en los países subdesarrollados está por debajo de los 20 años y con una tasa muy elevada de mortalidad materna. Los factores de riesgo pueden ser muy variados: embarazo en la adolescencia, gestante de más de 37 años, abortos de repetición, antecedentes de enfermedad hipertensiva gestacional, de cardiopatía maternal, de malformaciones o muerte fetal en gestación anterior y de prematuridad en gestaciones anteriores, diabetes gestacional y presencia de hábitos tóxicos en gestación. El 10% de los embarazos son de alto riesgo debido al aumento de la edad materna del primer embarazo. Es evidente que el momento de concebir el primer embarazo en los países desarrollados se ha retrasado, por lo que resulta fundamental el papel de las matronas en el control y el seguimiento del mismo.

Figura de las matronas

Las matronas desempeñan una importante función en la salud de madres e hijos, ya que su labor contribuye a reducir la mortalidad infantil y a mejorar la salud materna. Según el responsable del servicio de matronas de Hospital Quirón Murcia, Rafael Sáez, «las matronas son un pilar básico en la divulgación de la educación sanitaria sobre la maternidad y el embarazo, en identificar precozmente los de alto riesgo, en la prevención de los no deseados, en la planificación familiar, en la formación sobre métodos anticonceptivos y en la previsión de complicaciones durante el embarazo, el parto, el puerperio o el climaterio». Por tanto, resalta que la matrona «resulta fundamental en todas las etapas de la vida de la mujer y no solamente en la gestación y el alumbramiento».