Los Reyes de España, Felipe y Letizia, comenzaban este miércoles su viaje de Estado a Reino Unido. El estilo de Doña Letizia ha acaparado las miradas de medios estadounidenses y españoles. La Reina ha brillado con luz propia con looks sofisticados y con los que ha conseguido reproducir el estilismo inglés.

La agenda de los Reyes daba comienzo este miércoles a las 12:40 de la mañana, cuando el Príncipe Carlos y la duquesa de Cornualles acudían a buscar a Sus Majestades al hotel. Desde allí, se dirigieron al Horse Guards Parade, donde les esperaban la Reina Isabel y el duque de Edimburgo. Después, daba comienzo un almuerzo privado en el palacio de Buckingham antes de continuar con la agenda.

La Reina ha vuelto a confiar en Felipe Varela para un acto de gran repercusión internacional. Durante los primeros actos de la mañana, consiguió mimetizarse con el más puro estilo ‘british’ con un vestido de seda ‘cady’ amarillo limón con el bajo decorado con bordados de macramé blanco y un abrigo ‘tweed’ de verano en un tono más claro con bordados al final de la espalda.

Un tocado amarillo con flores de la diseñadora María Prieto daba el broche final al sofisticado ‘look’ que la Reina ha elegido para esta ocasión. Los complementos terminaban de completar su estilismo rompiendo con el amarillo. La Reina lució sus ya clásicos salones nude de Prada, cartera de mano a juego con el look y guantes de piel. Las únicas joyas del estilismo fueron unos pendientes de perlas y oro amarillo de la Reina Sofía.

Tras la comida privada en el Palacio de Buckingham, la Reina Letizia cambiaba su look y aportaba por su color fetiche. Así, cambiaba el color amarillo por el granate. Doña Letizia optaba por un vestido estilo ‘trench’ en crepé con revés de raso y detalle de hebilla de Burberry, una de las firmas más emblemáticas de Inglaterra.

La Reina seguía apostando por sus tacones nude de Prada y una cartera de mano del mismo tono que el vestido. Doña Letizia volvía a apostar por las joyas de la Reina Sofía y lució otros de sus pendientes. En esta ocasión, con forma de paloma de diamantes y rubís.

Pero, la guinda del pastel llegaría de mano de un espectacular vestido rojo adornado de Felipe Varela. Su color favorito para las citas importantes. Un look elegante con el que la Reina deslumbró en el baile. El corte Bardot del vestido hizo destacar aún más el look. En esta ocasión Doña Letizia optó por unos pendientes Cartier, un embrague de Magrit y su hermosa tiara ‘La Buena!’.

Tres looks elegantes y sofisticados que han convertido a Doña Letizia en el centro de todas las miradas. La Reina ha conseguido mimetizarse con el estilo inglés al detalle y brillar con luz propia, como ya nos tiene acostumbrados.