Larry ya se ha convertido en uno de los iconos de Downing Street. Este gato, de diez años, es el responsable 'oficial' de la caza de ratones en la residencia de los primeros ministros británicos. Larry suele ser amable con sus conocidos, como los miembros del gabinete de Theresa May, pero suele ser desconfiado con las visitas. Es lo que le ha ocurrido a un inversor japonés que acudía este jueves a una cita en Downing Street. Trató de hacer buenas migas con Larry pasándole la mano por el lomo, algo que no gustó para nada al felino, que salió huyendo. A veces hacer amigos a la primera no es fácil.