Toño Sanchís trata de rehacer su vida profesional mientras sigue envuelto en la gran polémica con Belén Esteban y otros de sus representados. El manager participará por primera vez en un programa de televisión con el que intenta poner espacio de por medio a sus disgustos. Levántante All Stars es lo nuevo para el prime time de los sábados de Telecinco, un talent show musical que sustiuirá a Got talent en el que Sanchís tendrá la oportunidad de actuar junto a Alfonso Aguado, gran compañero del representante y fundador de Los inhumanos.

Mientras disfruta de su paso de "representante a representado", Toño no deja a un lado la batalla que lidia desde hace meses con Belén Esteban, con la que estaba muy unido antes de que estallaran los problemas. Cansado de ser el protagonista de muchos debates en los platós, Toño no duda en limpiar su honor en los juzgados.

¿Te costó tomar la decisión de hacer este programa?

Sí porque es un programa muy serio, de champions, y para estar en un programa así hay que estar bien. No se pueden elegir los proyectos a la ligera. Yo como representante siempre he estudiado muy bien los proyectos que les ofrecían a mis representados y ahora tratándose de mí no iba a hacer menos. Estudié los pros y los contras, me salieron más pros y lo consulté con mi familia. Ellos me dijeron que si me apetecía adelante, y me apetecía, así que.

¿A qué te refieres con estar bien?

A que hay que estar bien siempre en todos los sentidos: mentalmente, físicamente y con actitud. Si no haces las cosas con actitud es complicado, aquí hay verdaderos craks. Me ha sorprendido mucho mucha gente. Además es Telecinco, una cadena líder y el programa se va a emitir los sábados en prime time, lo que quiere decir que te va a ver mucha gente. La gente va a ver lo que yo soy, hasta ahora he sido conocido por estar detrás de otra gente, ahora me van a conocer a mí y para eso hay que estar muy preparado psicológicamente.

¿Te da miedo?

No, miedo no, pero sí respeto, aquí hay campeones.

¿Lo ves como una oportunidad para que sepan quién eres realmente después de todo lo que se está diciendo de ti?

Sí, ha tenido que ver de alguna manera pero no ha sido lo que me ha impulsado a hacerlo. Tomo esta decisión por las circunstancias, claro, ahora era el momento profesional en el que podía hacerlo. Me habían ofrecido muchas veces ir a realities y esta vez me parecía un formato interesante, lo conduce el mejor presentador de la cadena, están de jurado Alaska y Mario, tengo la oportunidad de estar con mi compañero Alfonso Aguado y me pagan, todo empujaba a aceptarlo. Me encuentro bien y además estoy preparando un nuevo disco con La banda del capitán canalla en el que participan algunos de los mejores artistas de los ochenta y los noventa. Esto era un elemento más para sacar adelante el proyecto.

Hay quien puede pensar que participas en ese proyecto ahora de cara a lavar tu imagen...

Me hace mucha gracia. También me río mucho con lo de las redes sociales, que en un programa se analicen mis selfies me parece lo más surrealista que he vivido en mi vida. Me da igual.

¿Estás preparado para trabajar en la misma cadena de la que recibes tantas críticas?

Soy representante. El primer día que pisé estas instalaciones hice una reflexión: cuántos consejos he dado a tantos representados, cuantos nervios he aplacado. Y no sabía por dónde meter mano a esto. Estuve diez minutos convenciéndome a mi mismo de que estoy haciendo este programa porque quiero, me pagan, estoy con amigos y canto.

Musicalmente estás tranquilo, ¿te consideras un buen cantante?

Nosotros empezamos con grandes hitos de la canción con 'Los inhumanos', hemos dado ese punto a este escenario, no somos las grandes voces de este país pero somos unos magos de la diversión y sabemos trasladar nuestro estado de ánimo cuando estamos sobre un escenario. Eso es lo que queremos hacer también en este programa, transformar las canciones que nos tocan, es un reto y hay que echarle mucha cara. Hay que darle el punto canalla a la vida y a este escenario, creo que a veces se nos ha ido un poco la mano pero somos así. Ese es el Toño Sanchís que por ejemplo nunca habrá visto la gente, en el escenario se me ha ido la olla.

¿Crees que cuando el público vea a ese Toño cambiará su percepción de ti?

No es mi objetivo. Mi primer objetivo es pasármelo bien, y si de paso la gente me conoce, se divierte y ve otro Toño me parece perfecto pero si no es así me da exactamente igual.

Tiene que ser difícil en este momento lidiar con esas críticas...

Sí, las cosas te afectan, te afectan a todo. Claro que han hecho daño, mucho daño, he estado oyendo todos los días durante seis meses mentiras y absurdeces como que tengo una flota de coches de lujo. Yo tengo tres coches con diez años cada uno. No tengo ninguna casa en Miami ni en Cádiz. Son absurdeces, todo eso se tiene que ver en los juzgados, no en un plató de televisión.

¿Cómo te inmunizas a todo eso?

Estando bien conmigo mismo y estando bien con la gente que me rodea. Es alucinante el poder de la mente, lo pasé fatal las primeras semanas.

¿Puedes ver la tele?

Puedo ver la tele, lo que no quiero es ver determinados programas y determinadas personas.

¿Llegaste a perder la cabeza en algún momento?

No, porque me quiero mucho, me valoro mucho a mí mismo y me exijo mucho. Tengo cuatro hijos y una familia estupenda, no me podía permitir el que se me fuera la cabeza. Además, encontrarse con uno mismo es lo mejor que te puede pasar, he aprendido a cerrar unas puertas para abrir otras.

¿Cómo estabas cuando empezó todo, qué proceso has seguido?

Me encuentro en el plató de Levántate All Stars que es lo que me ha llevado a estar bien conmigo mismo. Mi situación está bien.

Controlas mucho el show business, ¿te esperabas la dimensión que ha tomado todo esto?

Es complicado.

Conocías muy bien a Belén Estebán y eres un artista de los tiempos...

Creo que he marcado bien mis tiempos.

¿Has decidido emprender denuncias y demandas judiciales contra determinadas personas?

Lo que he dicho antes es lo que hay que mantener, creo que el discurso no se puede tener en un programa de televisión o una rueda de prensa. Esos discursos se trasladarán a un juicio y un juzgado con mis abogados como portavoces, lo que no estoy dispuesto a hacer es mediatizar como se ha hecho porque eso no es ni justo ni lógico.

¿Es cierto que has demandando a Kiko, a Mila Ximénez y a María Patiño?

He demandado a las personas que creo que han faltado a la verdad, a mi honor, a mi respeto y a mi profesionalidad.

¿Crees que habéis jugado en desigualdad de condiciones?

No he jugado a nada, para mí esto no es un juego, es una cosa muy seria.

¿De todo lo que se ha dicho qué es lo que más te ha dolido?

Muchas cosas. Lo más terrible ha sido como se ha faltado al respeto a un tema tan delicado como es Lorca, voy a llegar hasta el final.

¿Eso es lo que te ha hecho demandar a Belén?

No voy a decir a quien he demandado y a quien no.

Te han tocado mucho la moral...

Mucho, pero jugar con Lorca me ha parecido muy sucio. No he estado en mi vida en una tienda Holister. Son surrealistas todas las cosas que se dicen. Tú puedes tener desavenencias administrativas porque es algo lícito pero montar este juicio mediático me parece mucho.

¿Crees que se te ha linchado?

Todavía se atreven a negar que ha habido un juicio mediático. Que mis hijos me tengan que estar diciendo porqué dicen que papá y mamá se quieren separar me parece muy fuerte. Me parece un atentado contra mi intimidad y un atropello contra los valores más esenciales de la vida que espero que tenga sus consecuencias.

¿Crees que se podría solucionar sin pasar por los juzgados?

Son cosas que son mías y tomaré las decisiones que crea convenientes.

¿Te ha afectado profesionalmente?

Las cosas vienen por lo que vienen y hay que aceptar las situaciones.

¿El programa te va a fortalecer?

Esto no está pensado con ningún objetivo. Estoy fenomenal, después de la tormenta viene la calma. Me he cortado el pelo, dicen que estoy más guapo y la cara es el espejo del alma, estoy contento y feliz.

¿Queda algo de tristeza por haber perdido la gran relación que tenías con Belén?

Esos sentimientos son míos y no me gusta compartirlos.

¿Si te llamara Belén Esteban por teléfono la atenderías?

No sé cómo reaccionaría.