La Policía Nacional ha detenido a veinticinco miembros de una organización internacional de trata y explotación sexual de mujeres, entre ellos una mujer considera la cabecilla de la trama, que había fijado su residencia en Helsinki (Finlandia), y ha liberado a dieciséis víctimas.

En la Región de Murcia, en el marco de esta operación, se detuvo a una mujer de 42 años y natural de Nigeria, indicaron fuentes policiales. Sin embargo, esta mujer nada tiene que ver con la trata. Lo que ocurrió es que estaba cobrando una pensión y, cuando se trasladó a vivir a Murcia, quiso seguir cobrándola, pero trabajar a su vez. Entonces la señora adoptó la identidad de otra persona, que sí está vinculada a la red.

Esta mujer fue arrestada por usurpación del estado civil.

También se encuentran entre los arrestados dos de los principales cabecillas, que residían en Barcelona, informa la Policía Nacional, que ha llevado a cabo la operación con el Departamento de Policía de Helsinki en coordinación con Europol y Eurojust, en la que ha sido desarticulada la red con una última arrestada hasta el momento durante la mañana de ayer en Madrid.

La organización estaba asentada principalmente en Benidorm (Alicante) y Málaga, donde prostituían a las jóvenes en jornadas maratonianas aunque también eran explotadas en Madrid, Barcelona, Soria y Gandía (Valencia).

Además contaba con ramificaciones en Nigeria, Níger, Libia e Italia, manteniendo así el control sobre las víctimas durante todas las fases previas a la explotación, como las de captación, traslados, alojamiento y control.