Una presunta agresión de una madre a su hija de 14 años en Alicante con una correa de cuero de cabra trenzada acabó con la detención por parte de la Policía Nacional de la progenitora y del padrastro. Fruto de este suceso se ha descubierto un caso de presuntos malos tratos habituales a esta niña y a su hermano de 5 años.

El origen de la agresión fue una foto subida a Instagram por la menor. La pareja quedó ayer en libertad provisional tras prestar declaración en el juzgado de guardia, aunque el magistrado acordó, a petición de la Fiscalía, la retirada de la custodia de los dos menores. Los padres declararon que la menor aparecía fumando en la foto subida a la red social.

El arresto se realizó hace unos días después de que la Policía Nacional fuera alertada por la madre de una compañera de instituto de la víctima. Los agentes fueron requeridos y la menor explicó que su madre, de 30 años, le había golpeado en la espalda y brazos con una correa de cuero a causa de una foto suya que había subido a Instagram.

La agresión se produjo en el domicilio familiar y tras ser golpeada la madre le amenazó con cortarle el pelo. Se dirigió a otra dependencia de la casa para recoger las tijeras y la menor aprovechó para marcharse de su casa.

A continuación se dirigió al domicilio de una amiga del instituto, donde contó lo ocurrido. La madre de su amiga llamó a la presunta agresora y le dijo que esa no era la forma de educarla, además de advertirle de que iba a avisar a la Policía.

Así lo hizo y los agentes desplazados al lugar trasladaron a la menor a un centro sanitario para ser atendida de policontusiones y hematomas.

La Policía también procedió a la detención de la madre de la agredida en su domicilio y esta reconoció que había castigado a su hija con una vara y que no podía permitir lo que había hecho.

Según la menor, la foto subida a la red social es normal y no es ninguna imagen insinuante. La joven de 14 años reconoció posteriormente que no era la primera vez que le pegaban y culpó también a su padrastro, un varón de 31 años progenitor de su hermano de 5 años, que también ha sido víctima de presuntos malos tratos, según los datos recabados por la Policía.

Tras la detención de la pareja el juzgado acordó la retirada de la custodia de sus hijos. El niño de 5 años ha quedado a cargo de su abuela y la menor de 14 queda tutelada por la Generalitat.