La Policía Nacional ha detenido en Barcelona a un fugitivo brasileño acusado del asesinato en 2013 de su hijastro de tres años, que era diabético y al que presuntamente suministró una sobredosis de insulina que le provocó la muerte.

El cadáver del niño fue localizado en las inmediaciones de la casa familiar, en un arroyo donde habría sido arrojado por el ahora detenido, según ha informado hoy la Policía.

El hombre quebrantó una orden judicial y se trasladó a Barcelona, provisto de documentación fraudulenta, donde en la actualidad estaba buscando trabajo.

A través de los mecanismos de cooperación policial internacional, la Policía Nacional tuvo conocimiento de la presencia en la capital catalana del fugitivo, sobre el que pesaba una Orden Internacional de Detención (OID) expedida por las autoridades de Brasil por asesinato, un crimen castigado con una pena de prisión de 30 años.

A pesar de tener prohibido abandonar su domicilio y el país sin autorización judicial, el ahora detenido se trasladó hace un mes a Barcelona utilizando documentación fraudulenta.

El operativo policial permitió su localización y detención el pasado jueves en el centro de la ciudad condal.

El fugitivo fue puesto a disposición de la Audiencia Nacional para que sea tramitada su extradición a Brasil.