Agentes de la Policía Nacional han detenido al cabecilla de un grupo criminal, de origen marroquí, al cual se le considera responsable de la introducción de al menos cinco toneladas de hachís en territorio español; a su pareja sentimental, y a su hombre de confianza, informa este cuerpo.
La banda utilizaba el garaje de un inmueble para preparar los vehículos destinados a ocultar y transportar la droga, y contaba con tres domicilios en las pedanías murcianas de Churra y de San Ginés, donde se han incautado 200 kilos de hachís, 40 de los cuales se encontraban ya ocultos en el interior de un coche.
Además, los agentes se han intervenido de 11.580 euros en efectivo y de una pistola del calibre 9 milímetros cargada y lista para disparar.
El inicio de las pesquisas tuvo lugar cuando los agentes localizaron en Murcia al principal responsable de la organización investigada, un hombre de origen marroquí al cual se le considera responsable de la introducción del hachís en España.
En un inmuebles almacenaba el hachís y en el garaje de ese inmueble se encontraba un espacio habilitado para la preparación de los vehículos destinados al transporte de las drogas mediante la habilitación de espacios aptos para ellos y disimulados en la propia estructura del coche.
Junto al cabecilla han sido detenidos su pareja sentimental y un hombre que actuaba como hombre de confianza del principal responsable de la organización en Murcia.
La detención de los tres investigados se llevó a cabo en el transcurso de un dispositivo policial durante el cual se practicaron tres registros domiciliarios, uno de ellos en el garaje de una de las casas, en el que fue localizado un coche colocado sobre gatos hidráulicos en el que se estaban habilitando espacios especialmente concebidos para la ocultación de la sustancia estupefaciente.
La operación ha sido desarrollada por la UDYCO de Murcia con la colaboración del GRECO (Grupo de Respuesta Especial contra el Crimen Organizado) de Cádiz y la Agencia Tributaria.
