Buñol se dispone a vivir hoy una nueva edición de la 'Tomatina', su fiesta mundialmente conocida, en la que el ayuntamiento y los colectivos festeros quieren poner el acento en rechazar toda clase de actitudes violentas y machistas y en evitar cualquier agresión sexista, homófoba, xenófoba o racista. En un vídeo coral, grabado en español, inglés, alemán y francés, entre otras lenguas, y en el que aparecen numerosos vecinos y representantes políticos de la localidad, Buñol hace un llamamiento al civismo y al respeto para «Tener la fiesta en paz». La propia alcaldesa Juncal Carrascosa advierte que las autoridades locales serán «especialmente contundentes con las agresiones racistas, sexistas y homófobas». «Nuestras fiestas -afirma- son para el disfrute de todas las personas libres, diversas y pacíficas».

Además, días antes del evento se ha lanzado una campaña institucional centrada en denunciar el acoso a las mujeres con el lema 'No es No', tanto en español como en inglés. La filosofía de esta campaña es evitar que se aproveche la aglomeración de público para atacar a la integridad física o moral de las participantes. Incluso habrá agentes de paisano que vigilarán este tipo de ataques.

Un dispositivo de 700 personas

Por otro lado, el Delegado del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Juan Carlos Moragues, supervisó ayer por la tarde el dispositivo de seguridad diseñado para garantizar la celebración de 'la Tomatina' en el Cuartel de la Guardia Civil con los responsables del mismo, la alcaldesa de Buñol y el concejal de seguridad Rafael Pérez. «Hay previsto un dispositivo de más de 700 personas, entre Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, bomberos, personal sanitario, miembros de Protección Civil y voluntarios para conseguir que los miles de asistentes disfruten al máximo de esta Fiesta, declarada de Interés Turístico Internacional. El dispositivo está reforzado y adaptado tras los últimos atentados terroristas», señalaba el Delegado.

El dispositivo prevé las medidas correspondientes al vigente nivel 4 de activación del Plan de Prevención y Protección Antiterrorista y al refuerzo establecido el 19 de agosto y, así, por ejemplo, los efectivos de la Guardia Civil han registrado un incremento del 5%. Habrá unos 200 agentes de la Benemérita, y se contará también con una oficina de denuncias móviles y con el apoyo de un gendarme, merced a la colaboración con las Policías Europeas.

«Nuestro objetivo es que sólo se hable de la guerra de tomates y que esta fiesta vuelva a dar la vuelta al mundo por su originalidad», añadió Moragues. Uno de los puntos más importantes es el blindaje del acceso a las calles del centro por donde transcurrirá el recorrido de los camiones que transportan las 160 toneladas de tomate que se arrojarán hoy. «Para ello, se han establecido varios filtros de seguridad y cordones con vehículos policiales que sirvan de medida pasiva de seguridad o de obstáculo para vehículos externos no autorizados», explicaba Moragues.