El actor murciano Paco Rabal tenía una frase mítica: «Qué a gusto se está, cuando se está a gusto». Esa frase nos viene que ni pintada para referirnos a la nueva etapa de Agustecho, en Molina de Segura, con la incorporación, en octubre de 2015, de su joven chef y socio José María Abad Bernal, de tan solo 24 años pero con una dilatada trayectoria en el mundo de la restauración, donde empezó con apenas trece años. «Qué a gusto se está, cuando se está en Agustecho».

Seis personas componen la plantilla de Agustecho con José María y su socio Agustín Rodríguez García con la ayuda en la cocina de Alex y Antonio, Javi y Borja atendiendo la barra o la terraza del restaurante.

El local, que antes fue mesón con varias denominaciones, cuando abrió Agustecho lo hicieron como bar de tapas, pero hoy están más enfocados a restaurante y proyectan remodelar la actual barra, que ocupa la zona central, para darle más espacio al comedor y ampliar el número de comensales -actualmente unos cuarenta en el salón y otros cuarenta en la terraza-.

Ofrecen a diario gran cantidad de tapas en su expositor de la barra como el lomo a la mostaza, pisto de pollo y pisto murciano, bacalao a la vasca y bacalao en su pimienta, así como ensaladillas y ensaladas murciana y de pimientos. También todo tipo de mariscos (gamba roja, blanca, cigalas, quisquillas y langostinos del Mar Menor) los fines de semana y los sábados preparan un pulpo al horno de diez kilos que tendremos que darnos prisa si queremos probar, pues no dura más de una hora sobre la barra.

La oferta de tapeo de Agustecho incluye unos excelentes caballitos caseros, calamar a la plancha o a la andaluza, croquetones de boletus, de chipirón o de jamón, revuelto de gulas y gambas, de jamón ibérico con trufas, foie de venado con mermelada de tomate, revuelto de bacalao, brocheta de langostinos y vieira, de foie al PX, tempura de berenjena y montaditos de secreto, de ternera con foie, de solomillo y de cerdo.

Sus platos estrella son el revuelto de gulas, el entrecot de angus, los caballitos de la casa y sus paellas de todo tipo como su arroz negro, de verduras, de pollo, de conejo, el arroz de secreto ibérico o su particular ´arroz ciego´, un arroz de marisco con todos los ingredientes pelados, atún, gambas, calamar, que se puede comer con los ojos cerrados.

Dedican especial atención al mundo de las carnes y en su carta no falta el steak tartar con nueve salsas o especias, secreto ibérico con pimientos de Padrón, entrecot de angus con mostaza caramelizada, solomillo de cerdo a la pimienta o hamburguesa de angus; pero también cuentan con una espectacular chuleta de vaca machorra, riñonada de vaca, solomillo de buey, secreto de novillo de angus, chuletero de chato murciano o lomo alto de novillo angus.

Ofrecen cuatro tipos de ensaladas y también cuentan con pescados como dorada a la espalda, tataki de atún con salsa de frutas, bacalao en tempura y emperador al ajoaceite.

Cuentan con un menú diario por diez euros con platos muy elaborados que incluye ensalada, primer y segundo plato a elegir entre tres posibilidades, bebida, postre y café.