El intenso y emocionante Jueves Santo se cerró en la madrugada con la Procesión del Silencio -presidida por la Archicofradía del Santísimo Cristo de la Sangre (Paso Encarnado) y por el Vía Crucis de Penitencia (Paso Morado) destino al Monte Calvario-. Un desfile en el que el recogimiento y la religiosidad estaban presentes, y en el que silencio sólo se rompía a golpe de saetas. Hoy, Viernes Santo, Lorca vive su día grande. En las Cofradías no hay huella de cansancio, y es que hoy es el día más importante de la Semana Santa. La Ciudad del Sol está lista para recibir a los miles de visitantes que abarrotan los palcos, y que quieren ver plenamente toda la puesta en escena que llevan a cabo los pasos Blanco y Azul, Negro, Morado y Encarnado. Un desfile donde se conjugan magistralmente religiosidad, historia, pasión y devoción. Y dónde los caballos, los mantos, las imágenes y tronos de las vírgenes sorprenderán a todos con el grueso de cada cofradía. Hoy, Viernes Santo, la Virgen de la Amargura también estará en carrera. Como novedad, el presidente lucirá una banda de estreno con dos medallones cuadrados con la representación del rostro de virgen y el águila de San Juan.