­Sierra Espuña cuenta con numerosos miradores, desde los cuales el visitante puede disfrutar de una vista de pájaro del parque regional. Entre ellos destaca el Collado Pilón, que se sitúa en la subida de las Alquerías al Collado Bermejo a una altura de 1.065 metros. Desde allí, y mirando a la parte suroeste de la Sierra, se puede observar el Barranco de Ballesteros, la zona de las Alquerías, la población de Aledo, con su majestuosa torre del castillo, y al fondo la Sierra de la Tercia. Por la parte norte, se puede ver el Pico de Pedro López y al oeste el cerro de los Albaricoqueros. En ocasiones, el turista puede encontrar a algún ejemplar de Águila Real sobrevolando el Pico de Pedro López. Este mirador es ideal para disfrutar el paisaje del Valle del Guadalentín.

Además, en esta zona se puede enlazar con los senderos 7 y 8 de la Red de Senderos de Sierra Espuña.

El mirador de Bermejo, ofrece una de las mejores panorámicas de toda la Sierra, ya que se encuentra situado a una altitud de 1.201 metros. Es un paso obligado si se quiere subir al Morrón de Espuña y a los Pozos de la Nieve, una parada aquí ofrece la oportunidad de ver lugares tan bellos como la Umbría de Peña Aparatada, la propia Peña Apartada, el Cerro de la Garita, el profundo y verde Valle del Río Espuña y, al fondo, se pueden ver los Barrancos de Gebas. Al Norte, el turista se encuentra con el Morrón de Espuña y en el oeste con el Barranco de Enmedio, El Purgatorio y el cerro de Pedro López. Al este de puede verse la Sierra de Carrascoy, con sus características antenas en la cumbre. Desde ese punto se puede ver casi la mitad de la totalidad del Parque. En la cima del Morrón se encuentra el Escuadrón de Vigilancia Aérea nº13, instalado aquí desde el año 1972. Actualmente su acceso está restringido sólo a personal militar.

Otro de los miradores es el de Mangueta, desde el que se puede ver los Pozos de la Nieve, Murcia a la derecha y Cartagena a la izquierda, parajes tan bellos como el cerro de Pinos Blancos, los barrancos de Malvariche y la Hoz, dos de los más importante que vierten al Río Pliego. Además, se puede ver las casas de Prado Mayor. Cabe destacar que, en el recorrido del sendero de Pedro López, existen dos pozos de la nieve restaurados; uno incluso es visitable.

Desde este mirador el visitante puede divisar al norte en días claros, la Sierra del Cambrón y la Peña Rubia. Esta zona era muy frecuentada y trabajada por las gentes que en octubre-noviembre venían de pueblos como Aledo, Alhama, Mula, Pliego y Totana. Algunos de los caminos actuales servían de paso para las mulas. Por la tarde-noche salían las mulas con el hielo bien tapado para que aguantara el largo camino que les esperaba. Las pérdidas de hielo eran de hasta el 50% de la carga. Es muy importante respetar el horario de paso hacia el Collado Mangueta, porque a las seis de la tarde se cierra.