Caja Mediterráneo ha editado dos libros, 'Caminos de la Vera Cruz' y 'El Peregrino en los Caminos de la Vera Cruz', cuyo fin es incentivar la peregrinación a la Ciudad Santa. El primero de ellos es una completa guía que recoge siete rutas (dos de ellas con dos variantes) que unen los cuatro puntos cardinales de la Región de Murcia y las provincias limítrofes con Caravaca.

El presidente territorial de Caja Mediterráneo, Ángel Martínez, explica que se trata de un manual de casi 300 páginas en "el que se recoge información detallada del patrimonio histórico, cultural y natural de todos los territorios que atraviesan los nueve itinerarios". Natursport ha realizado esta publicación ilustrada con más de 600 fotografías y una treintena de sencillos mapas de las distintas rutas que Caja Mediterráneo ha diseñado para llegar a Caravaca.

La primera ruta es la conocida como Camino del Apóstol, que une Cartagena con el Noroeste. Se llama así porque, según la leyenda, el apóstol Santiago entró a la Península Ibérica a través de Cartagena. El itinerario nace en el barrio de Santa Lucía de la ciudad portuaria y propone un recorrido alternativo a las grandes líneas de comunicación vial, utilizando carreteras de servicio, caminos tradicionales, vías pecuarias y senderos de montaña hasta enlazar con la Vía Verde del Noroeste (antiguo ferrocarril que unía Murcia con Caravaca de la Cruz). En total son 158 kilómetros de trayecto que se pueden recorrer en seis jornadas a pie.

El Camino del Lignum Crucis tiene dos itinerarios diferentes hasta enlazar con la ruta del Apóstol. El primer trayecto nace en Abanilla y confluye con la ruta de Cartagena poco antes de llegar a Campos del Río; mientras que la segunda variante comienza en el municipio alicantino de Granja de Rocamora y en Murcia se une con la ruta cartagenera. Ambos itinerarios se han creado con motivo del Año Santo 2010 y surgen por la vocación de buscar caminos que unan aquellas poblaciones que sienten devoción a la Vera Cruz, como es el caso de Abanilla, Ulea y Granja de Rocamora.

Para unir el Altiplano con el Noroeste, Caja Mediterráneo ha diseñado otra vía de comunicación pedestre de 130 kilómetros. Esta distancia se ha distribuido en cinco etapas, que pueden recorrerse sin excesivo esfuerzo y aprovechando los alojamientos de los lugares por donde pasa.

El Camino del Bajo Guadalentín surge en Mazarrón en la vía férrea abandonada. A partir de ahí rodea el cabezo horadado por la minería que está junto al pueblo y continúa por los campos del valle del Guadalentín, próximos a la rambla de las Moreras. Tras pasar cerca de La Pinilla y del Parque Regional de Sierra Espuña llega a Casas Nuevas, en el municipio de Mula. Siguiendo el Canal del Taibilla, el camino continúa hasta Bullas donde enlaza con el itinerario del Apóstol. Cuatro jornadas son suficientes para recorrer los 110,8 kilómetros de esta ruta.

Otro camino de 45,3 kilómetros une la provincia de Granada con Caravaca, aprovechando los senderos de gran recorrido GR 7 y GR 7.1, itinerarios que atraviesan las tierras de Cañada de la Cruz, El Hornico, El Tartamudo, Archivel, Las Oicas, Llano de Béjar y Caravaca de la Cruz.

Hay otra ruta que nace en Cañada de la Cruz, pero al contrario que la anterior gira en dirección norte por el Puerto Alto hacia la rambla de la Rogativa buscando el Campo de San Juan. Su nombre es, precisamente, Camino de San Juan y es quizá el itinerario de la Vera Cruz más natural, pues son muy pocos los núcleos habitados que transita y muchos los espacios naturales en los que se adentra. Pasa de los campos de cultivo a las zonas de montaña con gran facilidad, atravesando tierras que han sido habitadas por el ser humano desde el origen de los tiempos como lo demuestran sus yacimientos arqueológicos. A lo largo de 57,3 kilómetros pasa por la ermita de la Rogativa, Calar de la Santa, El Sabinar, La Risca y Llano de Béjar.

El último itinerario propuesto por Caja Mediterráneo para llegar a Caravaca de la Cruz comienza en la villa albaceteña de Letur y enlaza con el Camino de San Juan en El Sabinar, tras atravesar 27 kilómetros de espacios boscosos hendidos por numerosas ramblas y arroyos estacionales. Hace unos días, el presidente territorial de Caja Mediterráneo visitó Letur para presentar el libro de los Caminos y de El Peregrino, atendiendo a la petición de la alcaldesa del municipio, María del Carmen Álvarez, que espera que la celebración del Año Santo de Caravaca y la apertura de esta ruta de peregrinación sirvan para atraer a más turistas a Letur.

De forma paralela a la realización de los libros, Caja Mediterráneo ha promovido la limpieza, acondicionamiento y señalización de los nueve senderos que componen los Caminos de la Cruz para facilitar al peregrino el acceso a la Ciudad Santa de Caravaca. Para señalizar estas rutas se ha creado una marca exclusiva de los Caminos de la Vera Cruz, que consiste en la imagen de la Cruz de Caravaca sobre un fondo rojo.