­La asistencia integral y la protección que ofrece la red regional de Centros de Atención Especializada a Víctimas de Violencia de Género, integrada por una veintena de centros, juegan un papel fundamental para que la mujer pueda recuperarse completamente. Durante el año pasado, la red CAVI realizó un total de 23.023 intervenciones, atendiendo en ellas a 2.002 nuevas mujeres. El consejero de Justicia y Seguridad Ciudadana, Manuel Campos, comenta que este año se reforzará la atención especializada que reciben las víctimas en los centros, «para que alcancen el equilibrio necesario que les permita superar las secuelas del maltrato y emprender con seguridad e ilusión una nueva vida».

En este sentido, en 2011 se impulsará la realización de prácticas laborales en empresas del sector hostelero de la Región para mujeres víctimas de violencia de género, con el fin de que obtengan los medios económicos suficientes para lograr la independencia personal que les permita romper el vínculo con su agresor. Esto es posible gracias a un convenio firmado por el Gobierno regional y la Federación Regional de Empresarios de Hostelería y Turismo (Hostemur). Para acabar con el maltrato psicológico y físico en la mujer, la Consejería lleva a cabo medidas de sensibilización y acciones educativas directas, para que se denuncie cualquier caso sospechoso de malos tratos y, de esta manera, poner fin a esta lacra social desde edades tempranas.

A través del programa La máscara del amor se integran acciones formativas en los planes educativos de 50 institutos de Secundaria para que los jóvenes identifiquen aquellas actitudes violentas en las relaciones de pareja que pueden desembocar en malos tratos.

Este año se han unido 29 centros educativos a esta iniciativa, con el fin de que sus 1.500 estudiantes de Secundaria puedan prevenir la mentalidad y la actitud machista en la adolescencia.

Respecto a la atención de menores en riesgo de exclusión social, la Comunidad presta un importante apoyo asistencial y formativo a este colectivo, además de velar por el cumplimiento de las resoluciones judiciales adoptadas por los Juzgados de Menores, ya sean en régimen abierto, semiabierto o cerrado.