Se cumplen ahora catorce años de aquel sangriento 11 de marzo de 2004 que pasó a formar parte de la historia negra de España como consecuencia del brutal atentado terrorista que segó la vida de 193 personas en Madrid y dejó tras de sí a miles de heridos e innumerables familias sumidas en un profundo dolor.

Aún hoy, permanecen imborrables en nuestro recuerdo, en nuestra memoria personal y colectiva, las imágenes de aquellos días vividos en torno al mayor atentado terrorista cometido en España. Pero el terrorismo nos ha golpeado con fuerza desde hace más de cincuenta años, con la organización terrorista ETA sembrando nuestra existencia de amenazas, atentados, secuestros y asesinatos de personas inocentes.

En la Región de Murcia conocemos bien la crueldad sin límites del terrorismo porque alguno de esos atentados se produjo en nuestra tierra, y porque las víctimas de los mismos fueron paisanos nuestros. El sanguinario lenguaje del terrorismo ha dejado tras de sí muchas vidas rotas en la Región, que se han visto privadas del preciado derecho a la libertad.

Hoy es un día importante para reivindicar la memoria, la dignidad y el apoyo integral a las víctimas del terrorismo y a sus familias, con el respaldo de todos frente a la sinrazón del terror. Cuando se produce un atentado, es imprescindible ayudar a las víctimas supervivientes y a sus familiares y allegados a superarlo. Y hay que hacerlo desde la unidad y el acompañamiento constante, ya que el tiempo restaña las heridas, pero no las cierra.

En esta línea, el Gobierno regional ha materializado en acciones concretas el sincero deseo de preservar la dignidad y la memoria de las víctimas, dando cauce al trato que por justicia merecen. Contamos con la Estrategia de Apoyo a las víctimas del terrorismo de la Región de Murcia que ofrece un sistema integral único de apoyo a quienes han sufrido de manera más directa el terrorismo. Esta estrategia se alza como testimonio de ese reconocimiento y compromiso permanente con las víctimas, y ofrece un apoyo perdurable para contribuir, en alguna medida, a paliar sufrimientos que aún están muy presentes.

Es importante resaltar su carácter asistencial, pues ahonda en las ayudas que ya se vienen prestando por parte del Estado y de la propia Comunidad Autónoma. Se amplían las prestaciones, subvenciones y descuentos destinados a las víctimas del terrorismo y sus familiares, y se materializa ese apoyo continuo tan importante como necesario.

Somos la única Comunidad Autónoma de España que concede una tarjeta identificativa a las víctimas y afectados por actos terroristas, así como a los condecorados con la Medalla a las Víctimas del Terrorismo, y con ella pueden acceder los beneficiarios a las ayudas para la reparación de daños materiales o prestaciones asistenciales y a subvenciones. Este carné es una medida pionera en España y, con ella, se expresa de manera firme el compromiso de la sociedad murciana y del Gobierno regional con quienes han sufrido de modo más directo el zarpazo del terror.

Con esta estrategia, marcamos una línea de actuación de referencia en España en cuanto al apoyo integral a las víctimas del terrorismo sin olvidar que son ellas, junto a sus familiares, quienes hacen más fuertes nuestra sociedad y la democracia frente a la acción terrorista. Su sacrificado ejemplo, y su valor y coraje para romper el silencio y alzar la voz contra los que cometen actos terroristas y frente a sus cómplices, constituyen el espejo en el que todos nos tenemos que mirar para que, desde la unidad, se ponga fin a la violencia.

Hoy, en el Día Europeo de las Víctimas del Terrorismo, es el momento propicio para avanzar en la unidad, el compromiso y el respaldo a las víctimas, y la mejor ocasión para proclamar, con más fuerza y entereza que nunca, que no están solas en el dolor, y que estamos y estaremos siempre a su lado.