Se dice que la música es el lenguaje universal de la humanidad, y que permite la conexión entre culturas y generaciones diversas. Las asociaciones musicales son potentes instrumentos de socialización que no conocen de religión, diferencias sociales, ni política. En estos momentos, el movimiento asociativo musical es una potente herramienta social que persigue un bien colectivo como es la difusión y la práctica musical, la promoción de la cultura, el incentivo de la creatividad, y el fomento de la sociabilidad.

Esto es lo que llevó a que el pasado 30 de octubre, y entendido que era hora de pasar de las palabras a los hechos, el Grupo Parlamentario del PSOE registrara una moción en la Asamblea Regional para que de una vez se reconozca la labor cultural, social y educativa que realizan las bandas de música de esta Región.

En nuestra Región estamos hablando de unas cincuenta bandas de música, de ellas cuarenta forman parte de la Federación de Bandas de la Región de Murcia; las conforman más de 4.500 músicos, realizan alrededor de 1.500 actos de todo tipo, y a través de sus escuelas mantienen la formación de 10.000 educandos. Como vemos, el movimiento social que producen es inmenso, al que hay que sumar los socios de las propias asociaciones y las familias de los músicos, a las que hay que hacer un reconocimiento especial por ese esfuerzo y esa labor incondicional y logística que realizan en cada uno de los actos en los que las bandas participan.

Necesitan de la colaboración de las Administraciones para seguir con esa labor. Recordamos que son asociaciones sin ánimo de lucro, que han sufrido en gran medida los recortes sobrevenidos por la crisis y que solicitan que se creen o habiliten partidas presupuestarias destinadas a la adquisición y renovación de instrumentos, que como todos sabemos son caros y no todas las familias pueden permitírselo; de esta forma permitiremos que niños y niñas puedan acceder en igualdad de condiciones a este tipo de enseñanza.

Recientemente hemos conocido de esa inspección desde el ministerio de Trabajo para la comprobación de la contratación de los profesores por parte de las asociaciones musicales. Sin querer justificar cualquier tipo de situación ilegal, sí que resulta curioso que se realicen este tipo de inspecciones a estas asociaciones cuando hay tanto por investigar en esta Región y en este país en busca del verdadero fraude fiscal y los euros que se encuentran ocultos en paraísos extranjeros por valor, según el Consejo de Economistas, de 170.000 millones que, desde luego, no provienen de la actividad que realizan nuestras bandas.

La inmensa mayoría de las asociaciones musicales de nuestra Región cumple religiosa y escrupulosamente con la Ley, y colaboran con la creación de empleo y la economía de esta Región.

El Estatuto de Autonomía de la Región de Murcia en su Título Preliminar declara la obligación de proteger y fomentar las peculiaridades culturales, así como el acervo de costumbres y tradiciones populares de la misma, y por otro lado la Ley 4/2007 que habla del Patrimonio Cultural de la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia, en cuyo Preámbulo y en el objeto y ámbito de aplicación manifiesta, que «el Patrimonio Cultural de la Región de Murcia está constituido por los bienes muebles, inmuebles e inmateriales, como instituciones, actividades, prácticas, usos, costumbres, comportamientos, conocimientos y manifestaciones propias de la vida tradicional que constituyan formas relevantes de expresión de la cultura de la Región de Murcia».

Por ello, los diputados socialistas hemos considerado que la actividad que llevan a cabo las bandas de música o asociaciones musicales merece ser declarada como Bien de Interés Cultural Inmaterial, porque está más que acreditado ese sobresaliente valor cultural y social que realizan, justificado por los numerosos reconocimientos nacionales o internacionales, siendo grandes embajadores de nuestra tradición musical, dando a conocer el gran patrimonio inmaterial de la música heredada de nuestros antepasados que debemos de seguir protegiendo y entregar a nuestras nuevas generaciones.

Por otro lado, y en cuanto a las escuelas donde se imparten las enseñanzas musicales y que dependen de las asociaciones, es justo reivindicar y exigir que sean tenidas en cuenta desde la consejería de Educación haciendo una mención especial en lo que será la futura Ley de la Música de esta Región como así ya ocurrió en el 2013 en la Comunidad Valenciana.

Muchas de las fiestas que son declaradas de Interés Turístico nacional o internacional en nuestra Región (Semana Santa, Moros y Cristianos, Carnavales, etéctera) estamos seguros que no brillarían con el mismo esplendor con el que lo hacen e incluso no merecerían ese reconocimiento, sino hubiera un grupo de jóvenes o no tan jóvenes tocando un instrumento junto a quienes participan de esas fiestas.

En la Asamblea Regional 16 de noviembre y vísperas de la celebración de Santa Cecilia, patrona de los músicos, se ha dado un primer paso al reconocimiento y hecho justicia hacia quienes trabajan desinteresadamente por la cultura y la tradición de nuestra Región, y también por inculcar a nuestros jóvenes los valores y la cultura del sacrificio, el esfuerzo y el compañerismo que son tan necesarios en los tiempos que vivimos.

A quienes componen las asociaciones musicales de esta Región ¡feliz Santa Cecilia!